Telefónica España gasta 40 millones de euros más en costes energéticos por la crisis de la luz
Telefónica
Telefónica España ha sufrido un duro varapalo en sus costes operativos durante el tercer trimestre de este año. La operadora publicaba este jueves sus resultados registrados entre julio y septiembre reflejando una caída del Oibda (el equivalente al Ebitda de la compañía) del 8,9%, hasta los 1.182 millones.
Un retroceso que la propia compañía presidida por Emilio Gayo (en la foto) explicaba «por el impacto negativo de los mayores costes de la energía», un impacto que según ha podido confirmar THE OBJECTIVE fue de 40 millones en el tercer trimestre. Esto significa que la factura energética en España subió la friolera de 40 millones de euros durante los meses más duros de la crisis energética.
Esto supone elevar entre un 30% y un 40% los costes fijos de electricidad de la compañía, en los últimos trimestres cifrada en torno a los 120 millones de euros. Si consideramos que los costes totales de la operadora en España durante entre julio y septiembre estuvieron en torno a los 1.800 millones de euros, los costes energéticos ya significan casi un 10% de este total.
Al ser una empresa que debe mantener centrales de telecomunicaciones y redes de fibra óptica y de telefonía móvil, su factura eléctrica es uno de sus costes fijos más importantes, ya que su consumo de energía es ingente en edificios y redes.
El caso de Telefónica es un buen ejemplo de la sangría que están sufriendo las grandes empresas españolas y del Ibex 35 con la crisis de la luz. La mayoría han visto como sus costes energéticos se han elevado hasta un 40% desde que comenzase la escalada de los precios mayoristas.
Contratos de Telefónica
Los datos indican que entre julio y septiembre se ha multiplicado por cinco el precio mayorista de la luz y en algunas jornadas ha llegado a superar los 200 euros el megavatio por hora. De hecho, agosto, septiembre y octubre han conseguido sucesivamente en récord del mes con la factura de la luz más cara de la historia, tanto para empresas como para particulares.
En el caso de grandes empresas como Telefónica, probablemente las menos afectadas sean los bancos del Ibex como Santander, BBVA o Sabadell, pero otras compañías de transportes como Renfe, Iberia o AENA o manufactureras como CIE, Acerinox y ArcelorMittal están teniendo un duro impacto al realizar un uso intensivo de electricidad.
En medio de la crisis energética en nuestro país, Telefónica alcanzó nuevos acuerdos a largo plazo en España y Brasil para la construcción de nueva capacidad de generación de electricidad renovable para su propio consumo. Según la propia operadora, esta iniciativa buscaba mejorar el mix energético en estos países y reducir su exposición a las fluctuaciones del precio de la energía.
En este sentido, la operadora cerró un megacontrato a tres bandas con Iberdrola, Acciona y Endesa por diez años con un suministro comprometido de 482 GWh anuales. El objetivo es cubrir con energía limpia el 50% del gasto de sus edificios en España. Los contratos se cerraron bajo la modalidad PPA (Power Purchase Agreement).
El acuerdo con Iberdrola se cerró, pero se renegoció cuando la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán intentó repercutir los costes del decretazo eléctrico del Gobierno en sus clientes mayoristas, intentando ajustar los PPA a las nuevas condiciones económicas.
Tarifa plana de los PPA
En el caso de Acciona y Endesa esta crisis eléctrica ha retrasado la puesta en marcha de los acuerdos a la espera de que el mercado baje su tensión en las próximas semanas. El objetivo es retocar algunos puntos del contrato con el objetivo de que estén plenamente operativos a contar del año 2022.
Los PPA son contratos firmados a largo plazo entre las distribuidoras de energía (Iberdrola, Naturgy, Endesa y EDP) que garantizan el suministro de electricidad por un precio fijo blindando a las grandes compañías ante eventuales subidas de la luz.
Las grandes empresas contratan su energía construyendo un mix entre tarifa fija (PPA) y precios spot, es decir, comprando energía en el mercado libre. El porcentaje que las compañías del Ibex contratan de PPA suele rondar entre el 30% y el 60% para amortiguar posibles subidas inesperadas como las que se llevan produciendo en las últimas semanas.
Impacto en la recuperación
De momento no es el caso de Telefónica, pero el aumento de costes eléctricos en algunas empresas productivas pueden generar un efecto en cadena que podría provocar graves desequilibrios para la incipiente recuperación.
Por lógica económica, si una gran empresa ve incrementado en más de un 40% el precio de uno de los insumos que más peso tiene en su mix de costes operativos, como es la electricidad, se enfrentará a duros problemas de viabilidad.
Si además su facturación se mantiene estancada a causa de la COVID-19, en el mediano plazo será necesario recortar otras partidas. Incluso alguna gran empresa en dificultades por esta coyuntura ha avisado en privado que si la situación no cambia, podrían verse obligados a recortar incluso plantilla.
