Trump decretará la "emergencia nacional" para levantar el muro fronterizo con México

Donald Trump ha confirmado que declarará la «emergencia nacional» para financiar el muro de México, una de las promesas principales que le condujo hasta la Casa Blanca en noviembre de 2016. El gasto necesario para su construcción completa se acerca a los 25.000 millones de dólares, aunque la cuantía que logrará el dirigente será sustancialmente menor. En total, Trump conseguirá cerca de 8.000 millones para la construcción –muy por encima de los 5.700 millones que aspiraba a obtener inicialmente–.

Esta cantidad sale de 3.600 millones previstos para proyectos militares, 2.500 millones de programas contra el narcotráfico, 600 millones de un fondo de decomisos y 1.375 millones acordados con el Congreso que se integran dentro de un paquete de gastos estimado en 330.000 millones.

Si el magnate ha declarado la emergencia nacional se debe al bloqueo que ha sufrido durante meses por parte de los demócratas en el Congreso, quienes no han permitido que salga adelante esta partida presupuestaria pese a la insistencia republicana. Trump tendrá que echar mano de fondos reservados, fundamentalmente, para sofocar los daños derivados de catástrofes naturales –véase huracanes como Michael–.

En una comparecencia, el presidente republicano ha manifestado que ha tomado esta decisión como una forma de proteger a la nación ante el flujo constante de drogas, criminales e inmigrantes ilegales que entran por la frontera sur. Una amenaza que, en cualquier caso, no se apoya en ninguna estadística fiable y que ha denunciado en numerosas ocasiones la oposición. La última en hacerlo ha sido Nancy Pelosi, líder de los demócratas en el Congreso, quien ha ironizado que se trata de una emergencia nacional «creada por él» y ha alertado que esta decisión sienta un precedente peligroso.

Ahora bien, ¿significa esto que Donald Trump se va a salir con la suya? No necesariamente. Los demócratas trabajan en las vías posibles para impedir que Trump active la emergencia nacional. Sin embargo, es difícil que lo consigan. La Cámara de Representantes y el Congreso, conjuntamente, pueden paralizar el estado de emergencia en el Senado alegando que el presidente está actuando de manera irresponsable o que no existe tal amenaza, como informa The New York Times.

El mayor inconveniente con el que cuenta la oposición es que el grupo demócrata no dispone de los votos necesarios en el Senado para bloquear las intenciones de Trump. Así que su última esperanza pasa por conseguir el apoyo de los republicanos contrarios a recurrir a esta artimaña para proceder al levantamiento del muro. Si esta vía fracasa, los demócratas avanzan emprenderán el camino de los tribunales.