Ni los problemas físicos ni Shapovalov pueden con un Nadal que ya está en semifinales
Tras más de cuatro horas de enfrentamiento, el balear ya se encuentra entre los cuatro mejores de Australia
Nadal celebra la victoria ante Shapovalov. | Loren Elliot (Reuters)
Rafael Nadal ya está en semifinales del Open de Australia. El balear ha logrado hacerse con un pase a la siguiente ronda de la competición tras imponerse al tenista canadiense Denis Shapovalov, el decimocuarto del mundo, en un partido de 4 horas y ocho minutos en las que Nadal ha tenido que vencer a su rival… y a los problemas físicos.
El balear lograba imponerse al norteamericano en el que es el segundo encuentro de ambos en menos de dos meses. Aunque en la anterior partida fue el canadiense quien se hizo con la victoria, en Australia, Nadal hizo valer su mejoría sobre la pista y sus galones, siendo Australia su segunda competición fetiche, solo por detrás de Roland Garros.
Durante la primera manga, un Shapovalov poco centrado no lograba hacerse con el partido y cedía hasta el 4-1 para el balear, que se deshacía del primero sin demasiadas complicaciones y dejaba el primer set en un claro 6-3 a su favor.
En un segundo set más accidentado, en el que incluso acusó de «corrupto» al árbitro del encuentro cuando Nadal retrasaba su saque, el canadiense planteó un partido más complejo para el español, e incluso llegó a tenerle cerca de someterle. Pero el saber hacer del balear y su capacidad de romperle el saque a Shapovalov en el séptimo juego puso la segunda manga en un 6-4 que dejaba al tenista a solo uno más de la victoria.
En el tercer acto el canadiense dio su mejor versión. Ante un Nadal visiblemente incómodo y cansado, Shapovalov lograba descolocar al balear en la pista, quien no lograba conseguir una ventaja efectiva e incluso llegó a cometer alguna doble falta.
Nadal pidió asistencia en dos ocasiones
Cuando el norteamericano se imponía por cuatro juegos a uno, Nadal se vio obligado a pedir asistencia médica por varios problemas estomacales que, afortunadamente, no le impidieron continuar. Hasta el momento, el pie izquierdo del tenista, que le mantuvo como duda en el torneo hasta el último instante, no parecía estar mermando el juego del manacorí, aunque una vez finalizado el tercer set por debajo del canadiense (4-6), el tenista volvió a mostrar malestar seguido de continuas miradas a los fisioterapeutas en los descansos.
En un cuarto set en el que Nadal se encogía por momentos, poco pudo hacer ante las ganas del canadiense, que levantaba el partido hasta las tablas a dos tras imponerse por 3-6 y que obligaba al español a un todo o nada en el quinto set.
Sin embargo, todo cambió tras un parón de seis minutos en el que Nadal pidió asistencia médica en el vestuario. Una vez de vuelta, el jugador de la pista era otro y se imponía bola a bola a su rival, quien poco o nada podía hacer tras encadenar fallos y fallos en el revés. El español cerraba con un claro 6-3 su paso a las semifinales del viernes en Australia, donde se enfrentará al vencedor del duelo Monfils-Berrettini que se disputará hoy.
