51 personas están desaparecidas tras el derrumbe parcial de un edificio de 12 plantas en Surfside, en Miami Beach, según ha informado este jueves una fuente del condado al canal local de la cadena CBS.
En contexto: un tercio del edificio residencial de 12 plantas y 40 años de antigüedad se ha derrumbado por causas no determinadas, mientras sus habitantes dormían. Al menos una persona ha muerto y una decena han resultado heridas, aunque se teme que pueda haber más víctimas entre los escombros.
Así, el alcalde de Surfside, Charles Burkett, ha confirmado en una rueda de prensa que una de las primeras personas rescatadas murió al llegar al hospital y ha subrayado que es posible que haya más muertos, pues la parte este del edificio se ha derrumbado planta sobre planta y, por tanto, puede haber personas aplastadas entre las capas.
Diez personas fueron tratadas en el lugar, dos fueron transportadas a hospitales y 35 rescatadas por los balcones del edificio, según fuentes oficiales. Según ha añadido Burkett, hay algunos apartamentos de cuyos ocupantes no se sabe nada todavía, lo que constituye una mala señal.
El edificio tiene entre 100 y 130 apartamentos, pero no se sabe cuántos estaban ocupados anoche ni cuántas personas había dentro cuando cayó una parte completa de la estructura, pues hay muchos vecinos que no viven permanentemente allí.
Por ende, los equipos de rescate siguen trabajando en busca de personas atrapadas entre los escombros del edificio, aunque las tareas de búsqueda dirigidas por los bomberos del condado de Miami-Dade se han visto entorpecidas por la lluvia.
En este sentido, la labor se inició con perros en medio de la noche, pero era «muy peligroso y estaba muy oscuro», según ha señalado Burkett, quien ha calificado de «estremecedor» lo ocurrido y ha pedido agradecimiento y respeto para los rescatistas, que «se jugaron la vida».
El gran temor es la posibilidad de que el edificio se desplome totalmente mientras se realizan esas tareas, pese a que todavía aun no hay elementos suficientes como para determinar la causa del colapso. Por otra parte, pese a que se estaban realizando obras en la cubierta, el alcalde no cree que eso pueda haber provocado «algo que no suele pasar en Estados Unidos».
«Es como si esa ala (del edificio) no hubiera existido nunca», ha dicho a su vez a los medios Jacquelina Patoka, de la oficina de asuntos gubernamentales del Paseo de las Estrellas de Las Vegas, dueña de dos apartamentos en el edificio colapsado. Se ha mostrado angustiada porque unos amigos suyos, un matrimonio argentino y su hija, de 6 años, se habían trasladado la pasada noche a uno de sus apartamentos, que ha quedado «totalmente» destruido.
No solo ella, sino que numerosas personas se congregaron en las inmediaciones del edificio, por fuera del cordón de seguridad, como Santos Mejía, quien dijo al canal Local 10 que su esposa, Janet Rodríguez, estaba en el edificio cuando le llamó para decir que había sentido un terremoto.
Las autoridades han habilitado un teléfono para personas que estén buscando información sobre los residentes del edificio Champlain Towers y también funciona un centro de reunificación familiar en la zona. Igualmente, la Cruz Roja se ha encargado de dar alojamiento a los residentes que tuvieron que abandonar sus viviendas en hoteles de la zona.