Aumenta hasta el 31,3% la pobreza en Argentina
En la periferia de Buenos Aires, la región más poblada del país, el índice de pobreza sube al 41,1%
La pobreza en Argentina creció en 2018 y alcanza ya al 31,3% de la población, que sufre carencias de alimentación, vivienda, acceso a la salud o a la educación, según un informe de la Universidad Católica. El registro es la mayor marca desde 2010, cuando la UCA comenzó a medir la pobreza en zonas urbanas no sólo por el nivel de ingresos como lo hace el índice oficial, sino valorando además déficits de alimentación, salud, vivienda, educación, empleo y seguridad social, entre otros.
El estatal Instituto de Estadísticas debe difundir el jueves su medición de pobreza para el segundo semestre de 2018. Los últimos datos oficiales correspondientes al primer semestre cifraron la pobreza en 27,3%, informa AFP. Según el informe de la UCA, la pobreza sumó 1,9 millones de personas durante 2018 y alcanza a 12,6 millones de argentinos que viven en zonas urbanas. En 2017 el mismo índice había arrojado un dato del 26,6%.
El estudio define como pobres a aquellos que, además de carecer de ingresos, no acceden a por lo menos uno de los derechos socioeconómicos básicos.
Clases medias bajas empobrecidas
En 2018 la pobreza multidimensional experimentó un fuerte aumento «por el crecimiento de la pobreza por ingresos, por caída del salario, pérdida de empleo y mayor precarización laboral, en el actual contexto inflacionario y de estancamiento», ha dicho Agustín Salvia, director del Observatorio de la Deuda Social, a cargo del estudio. En el último año, «los más empobrecidos han sido los sectores obreros y las clases medias bajas», reza el informe.
Argentina atraviesa una crisis económica que le llevó el año pasado a pedir un acuerdo por 56.000 millones de dólares (cerca de 50.000 millones de euros) al Fondo Monetario Internacional. Con una caída del PIB en 2018 del 2,6%, el país entró en recesión económica. La inflación llegó al 47,6% el año pasado y el desempleo alcanzó el 9,1% en el último trimestre, según datos oficiales.
«Buena parte del crecimiento de la pobreza multidimensional y de la pobreza estructural se debió fundamentalmente al aumento de la pobreza por ingresos«, ha indicado Salvia. En ese sentido, ha apuntado que «quizá muchas personas tenían problemas de carencias multidimensionales estructurales, pero ahora sumó la incapacidad monetaria en temas de consumo para cubrir la canasta básica total».
Según el informe, 30% de los hogares se encuentra marginado de los derechos laborales, con un 28% de hogares que no tiene ningún vínculo con el sistema de seguridad social. En la periferia de Buenos Aires, la región más poblada del país, el índice de pobreza sube al 41,1%.
«Este segmento de la sociedad parece sobrar para este tipo de modelo económico. Solo se los atiende con asistencia monetaria, pero no con políticas efectivas de desarrollo económico, social y humano. Todavía esas políticas están ausentes del debate político», ha remarcado Salvia.
Argentina tendrá elecciones presidenciales el 26 de octubre, en las que Mauricio Macri se postula para renovar su mandato por otros cuatro años.
Visita de los reyes de España
Este crecimiento de la pobreza en Argentina se conoce un día después de la llegada al país de los reyes de España, que aterrizaron este domingo a Buenos Aires en su primera visita de Estado a Argentina, un viaje que iniciaron con una anécdota al demorarse casi una hora su bajada del avión por la ausencia en el aeropuerto de una escalera adecuada. El Airbus 310 de la Fuerza Aérea Española en el que se desplazaron a la capital argentina aterrizó en el aeródromo metropolitano Jorge Newbery poco antes de las nueve de la noche (hora local).
Se trata de un aeropuerto ubicado en la misma ciudad de Buenos Aires y en el que habitualmente operan aviones de menor altura y envergadura que los que lo hacen en el aeropuerto internacional de Ezeiza, situado a unos 35 kilómetros al sudoeste de la capital argentina. La cercanía del aeródromo al centro de la ciudad fue uno de los motivos por los que se decidió que el avión de los reyes aterrizase en su pista. Lo hizo y se desplazó hasta el lugar en el que sus ocupantes tenían que descender, donde se encontraban ya esperando un cordón de honores y las autoridades correspondientes.