El Gobierno desoye al Consejo de Estado y seguirá adelante con el recurso de la reprobación al rey al TC

El Gobierno ha decidido desoír al Consejo de Estado y recurrirá igualmente al Tribunal Constitucional la reprobación al rey aprobada por el Parlament de Cataluña a instancias de En Comú Podem. El Consejo de Estado, cuyo dictamen no es vinculante, ha indicado que la moción de la Cámara autonómica no conlleva ningún efecto jurídico.

A pesar de ello, el Ejecutivo ha decidido interponer el recurso por «sentido de Estado», ha anunciado la portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, tras la reunión del Consejo de Ministros, celebrada este viernes excepcionalmente en Sevilla.

El Gobierno ha justificado su decisión diciendo que la reprobación del Parlament a Felipe VI, motivada por el posicionamiento del monarca en la crisis catalana, «es inconstitucional, pues supone un nuevo intento del Parlament de Cataluña de iniciar un proceso unilateral que desemboque en la proclamación de una hipotética república», en palabras de Celaá. Asimismo, la también ministra de Educación ha argumentado que el Gobierno tampoco entiende «que sea admisible desde el punto de punta de vista político ni jurídico el intento de abolición de la monarquía» y que este «supone una extralimitación en las funciones de la cámara catalana».

El Consejo de Estado está de acuerdo con el Ejecutivo en que «tales resoluciones son un grave atentado al principio de lealtad institucional«, pero «entiende que estas mociones parlamentarias tienen una naturaleza netamente política y no jurídica, pues no se integran en el ordenamiento ni producen efectos jurídicos de ningún tipo».

Isabel Celaá ha aclarado que el informe que había solicitado el Ejecutivo al Consejo de Estado sobre esta materia «es preceptivo pero no vinculante» y por eso recurrirá igualmente al Tribunal Constitucional. También ha subrayado que el Gobierno «agradece y respeta su dictamen» del Consejo de Estado pero no comparte «su argumentación jurídica».