Retar a duelo, una práctica que sobrevive gracias a la espectacular esgrima olímpica
La esgrima tiene su origen en las luchas a espada producto de los retos a duelo, pero no llegó a considerarse deporte hasta más tarde, cuando las armas blancas dejaron de tener como objetivo la defensa personal. Tanto ingleses como franceses, españoles, italianos y hasta alemanes, se disputan el origen de la esgrima moderna y existen textos del siglo XIII que ya mencionan las técnicas y metas que establecen las bases de las competiciones que vemos hoy en día. En 2008, el esgrimista español José Luis Abajo consiguió subirse al podio logrando un oro en Pekín 2008, pero si contamos las medallas ganadas en toda la historia de los Juegos Olímpicos en la categoría de esgrima, Italia lleva la cabecera, seguida por Francia y Hungría.
Reuters
Si no fuera por los Juegos Olímpicos, pocos podríamos presenciar la espectacularidad y elegancia de la esgrima, un deporte que estuvo presente desde el comienzo de los Juegos en Atenas 1896. Por aquel entonces, sólo se contemplaba la categoría masculina, y la femenina se incorporó en 1924. En la imagen, la ucraniana lga Kharlan y la rusa Yana Egorian demuestran la pervivencia de los combates a duelo en Río 2016.
La esgrima tiene su origen en las luchas a espada producto de los retos a duelo, pero no llegó a considerarse deporte hasta más tarde, cuando las armas blancas dejaron de tener como objetivo la defensa personal. Tanto ingleses como franceses, españoles, italianos y hasta alemanes, se disputan el origen de la esgrima moderna y existen textos del siglo XIII que ya mencionan las técnicas y metas que establecen las bases de las competiciones que vemos hoy en día. En 2008, el esgrimista español José Luis Abajo consiguió subirse al podio logrando un oro en Pekín 2008, pero si contamos las medallas ganadas en toda la historia de los Juegos Olímpicos en la categoría de esgrima, Italia lleva la cabecera, seguida por Francia y Hungría.
