'Anatomía de una caída', de Justine Triet, gana la Palma de Oro del Festival de Cannes
La película es un thriller judicial sobre el fallecimiento de un hombre que cae de un segundo piso de su vivienda en los Alpes franceses
La película Anatomía de una caída (Anatomie d’une chute), dirigida por la cineasta francesa Justine Triet, ha sido galardonada este sábado con la Palma de Oro de la 76 edición del Festival de Cannes, en la que el director vietnamita Thien An Pham se ha hecho con la Cámara de Oro por un cinta coproducida con España, según informa Europa Press.
Así se ha anunciado en la gala de clausura del festival, que ha tenido en esta ocasión un jurado presidido por el sueco Ruben Östlund, ganador del principal premio de la pasada edición y uno de los nueve realizadores que se han alzado dos veces con el mismo.
La actriz Jane Fonda ha sido la encargada de dar a conocer el título de la película ganadora de la Palma de Oro, un thriller judicial sobre el fallecimiento de un hombre que cae de un segundo piso de su vivienda en los Alpes franceses, muerte de la que se señala como sospechosa a su mujer.
Con esta cinta, Triet se convierte en la tercer mujer en ganar la Palma de Oro en las 76 ediciones del Festival de Cannes tras Jane Campion y Julia Doucurnau.
Al recoger el galardón, la cineasta ha reivindicado la «histórica y potentísima protesta» contra la reforma de las pensiones en Francia y ha denunciado que esta ha sido «reprimida de forma escandalosa».»Este modelo de poder dominante, cada vez más desinhibido, está irrumpiendo en varios ámbitos. Aunque socialmente es donde resulta más chocante, se puede ver en todas las demás esferas de la sociedad. Y el cine no es una excepción», ha advertido.
Asimismo, ha lamentado que la «mercantilización de la cultura que defiende el gobierno neoliberal está en vías de destruir la excepción cultural francesa», la misma sin la que ella, ha dicho, no estaría en la clausura de las 76 edición del certamen, cuyo galardón ha dedicado a los jóvenes directores, también a los que actualmente «no pueden hacer cine».
A ellos, ha añadido, se les debe «un espacio»: «El espacio que yo ocupé hace 15 años en un mundo un poco menos hostil donde todavía era posible equivocarse y volver a empezar».