El truco definitivo para limpiar el acero inoxidable sin cercos ni manchas
Con un método bien aplicado y una rutina de mantenimiento adecuada, puedes evitar que aparezca la suciedad

Una pila de cocina de acero inoxidable. | Canva
El acero inoxidable es un material resistente y ampliamente utilizado en cocinas, electrodomésticos y superficies de baño. Sin embargo, mantener su brillo resulta complicado.
Es importante comprender por qué aparecen esos molestos cercos y manchas en el acero inoxidable para saber cómo limpiarlas. La mayoría de ellos provienen del agua con minerales, del jabón mal aclarado y de productos que dejan película como los limpiadores.
El truco para limpiar el acero inoxidable
El truco consiste en usar aceite vegetal suave (como de oliva o de girasol) junto con un paño de microfibra, aplicando siempre en el sentido del veteado del acero. Este método es eficaz porque protege la superficie sin usar productos químicos agresivos. Además, el aceite disminuye la aparición de manchas.
Cómo llevar a cabo el truco
Aquí tienes los pasos:
- Con agua tibia y jabón neutro, limpia la superficie de acero inoxidable para retirar el polvo, grasa o suciedad superficial. Y vierte una pequeña cantidad de aceite vegetal en un extremo del paño de microfibra.
- Pasa el paño ligeramente en dirección del veteado del acero. Haz movimientos suaves, el aceite ayuda a formar una película protectora que evita huellas y marcas.
- Con otro paño de microfibra limpio y seco, retira el exceso de aceite, siempre en el mismo sentido del veteado. Frota hasta que quede brillante.
Otros trucos para limpiarlo
Estas ideas también son ideales para limpiar el acero inoxidable rápidamente:
- Mezcla partes iguales de vinagre blanco y agua destilada en un pulverizador. Rocía ligeramente sobre el acero inoxidable y limpia con paño de microfibra.
- Haz una pasta con bicarbonato y unas gotas de agua, aplícala con un cepillo suave, frota con suavidad y aclara bien.
- Se puede aplicar un poco de leche desnatada sobre un paño de microfibra y frotar suavemente.
- De vez en cuando para una limpieza más profunda, usa productos comerciales diseñados para acero inoxidable que contienen silicona de grado alimentario. Si los usas, hazlo con moderación y siempre eliminando el exceso, para evitar película.
- Nunca uses estropajos metálicos, lana de acero, o productos que contengan cloro fuerte o ácidos concentrados aceleran el desgaste y rayan la superficie.
- Una de las claves para que el acero inoxidable se mantenga impecable es limpiarlo pronto tras salpicaduras y siempre secarlo bien.
Con estos consejos, podrás mantener tus superficies de acero inoxidable libres de cercos y manchas, devolviéndoles su brillo original día tras día. Si adoptas esta rutina, tus electrodomésticos seguirán luciendo impecables durante mucho más tiempo.