Sánchez sopesa otro cambio al frente del deporte español
La falta de un proyecto deportivo sostenible ha llegado a ser definido por un ilustre dirigente como «el otro Valle de los Caídos» del presidente
José Manuel Franco podría dejar de ser secretario de Estado para el Deporte en próximas fechas, convirtiéndose en el tercer presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD) que pasaría a ex en la era de Pedro Sánchez. Fuentes internas del Gobierno apuntan a Onda Cero y THE OBJECTIVE que cada vez son más fuertes los indicios que llevan a ver cercana la salida del que fuera delegado de Gobierno de Madrid durante el polémico 8-M de 2020 y secretario general del PSOE en la comunidad madrileña. Las citadas fuentes apuntan al mes de marzo, aunque no descartan que pudiera salir coincidiendo con los cambios que tiene previsto realizar Sánchez en el Gobierno.
Franco llegó a la presidencia del Consejo Superior de Deportes el pasado 30 de marzo de 2021 para sustituir a Irene Lozano, que fue destituida por el presidente del Gobierno, quien se puso del lado de sus homólogos de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, y del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco, en el enfrentamiento directo que mantenían con la por aquel entonces secretaria de Estado para el Deporte, cargo en el que había reemplazado a María José Rienda, destituida en una idéntica confrontación con Rubiales y Blanco.
Aunque algunos han apuntado a Franco como ministrable por la cercanía y lealtad con el máximo jefe de La Moncloa en asuntos como no dar traslado al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) de las denuncias contra el presidente de la RFEF Luis Rubiales, todo apunta hacía un giro en la estrategia de Sánchez en su política deportiva en año electoral.
Con el paso del tiempo el nombramiento de Franco se ha visto desde muchos despachos del deporte como «un parapeto» para frenar una posible inhabilitación de Luis Rubiales, su gran caballo de batalla durante estos casi dos años de mandato en el CSD. Mientras tanto, temas de máxima importancia como la candidatura para organizar el Mundial 2030 de fútbol han sido liderados por Victor Francos, persona de confianza del ministro Miquel Iceta y Juan Carnicer, jefe de gabinete de presidencia del CSD, al que se considera desde dentro de la institución el presidente de facto y candidato a la sucesión.
Si se consuma esta salida, Sanchez aumentaría a cuatro el récord de responsables del deporte español en una legislatura, lo que se suma a cuatro ministros de Cultura y Deporte, el breve Máximo Huerta, el difunto José Guirao, José Manuel Rodríguez Uribes y el actual Miquel Iceta; a otros tantos directores generales, Mariano Soriano, Joaquín de Arístegui, el recién salido Albert Soler y su sustituto Fernando Molinero; y tres responsables del área jurídica, el histórico Ramón Barba, que fue cesado también por los conflictos con la RFEF de Rubiales, Angel Luis Martín Garrido y el citado Molinero.
Todos estos vaivenes han creado una gran desazón en el mundo del deporte por la falta de un proyecto sostenible que ha llegado a ser definido por un ilustre dirigente deportivo como «el otro Valle de los Caídos de Pedro Sánchez».