Discriminación por mes de nacimiento: el efecto de la edad relativa en el deporte
Los nacidos durante los primeros meses del año suelen ser mayoría a la hora de progresar deportivamente
El efecto de la edad relativa –Relative Age Effect (RAE)– se produce cuando, en un ámbito concreto hay una presencia menor de personas nacidas en los últimos meses próximos al corte de edad a partir del cual se pasa a una nueva categoría. Generalmente, ese corte se produce con el año natural, aunque también hay cortes en otros meses. El más frecuente suele ser agosto. Las competiciones deportivas y los cursos escolares se suelen organizar siguiendo el año natural.
De hecho, el deporte es, sin duda, uno de los ámbitos en los que más se manifiesta este efecto. El primer estudio sobre él se realizó en 1985. Se llamaba Hockey success and birthdate: The RAE. Los investigadores descubrieron que en la liga juvenil de hockey sobre hielo de Canadá había un 40% de jugadores que habían nacido en enero, febrero o marzo. Pronto se comenzaron a hacer estudios sobre esas circunstancias en el deporte más practicado en el mundo, el fútbol, ya que el RAE se produce generalmente entre hombres que compiten en los deportes con gran masa crítica de jugadores en el momento en que los equipos hacen la captación y selección de sus categorías inferiores.
Este efecto tiene lugar también en otros deportes, siempre que estos tengan un gran número de practicantes en el momento en el que se realiza esa selección de jugadores. Para entender por qué se produce hay que tener en cuenta que el proceso de captación se lleva a cabo en edades en las cuales hay grandes diferencias de desarrollo psicomotriz, de peso y de estatura entre los nacidos en los primeros meses y los nacidos en los últimos. Esta primera selección es decisiva tanto para los escogidos como para los no escogidos en ese momento.
Los tres efectos más comunes
A partir de ahí, hecha esta selección sesgada, se producen tres efectos que ayudan a consolidarla, tal y como se explica en el estudio A proposed theorital model to explain RAE in sport. El primero de ellos es el efecto Mateo, en referencia a la parábola de los talentos de su evangelio (Mateo 25:14-30), que dice que el que más tiene más recibirá. En el caso del RAE, el efecto se explica porque estos jugadores elegidos recibirán la ayuda de técnicos y entrenadores para ascender hacia la élite.
El efecto Pigmalión debe su nombre al mito griego por el que un escultor acabó enamorándose de la estatua que él mismo había creado. Este efecto hace que los entrenadores infundan expectativas que condicionarán la evolución de los jugadores.
Por su parte, el efecto Galatea, que es incluso más potente que el Pigmalión, hace referencia a las propias expectativas que uno tiene de sí mismo. En este caso, habrá un aumento de la autoestima de los niños elegidos y esta es muy necesaria para superar los retos a los que se enfrenta el deportista en su ascenso en equipos de alto rendimiento. Los efectos contrarios se producirán en los niños no elegidos, que se verán relegados a tener peores entrenadores o incluso a perder la motivación y dejar ese deporte. También podrían ver rebajadas las expectativas que los demás tienen depositadas en ellos y, por lo tanto, perder su autoestima.
¿Cómo funciona en el fútbol europeo?
Estudios en las grandes ligas europeas de fútbol han mostrado cómo alrededor del 75-80% de los jugadores de cantera de los grandes equipos habían nacido en el primer semestre del año y cómo este efecto se iba diluyendo sin que se solucionase del todo, pues en la élite aún seguía habiendo un 60-65% de nacidos entre enero y junio. Otros estudios muestran las diferencias en la selección en canteras en función del modelo de los propietarios del club. Los clubes propiedad de organizaciones públicas no muestran RAE, mientras que en los privados es mucho más habitual.
Si sumamos el efecto producido en diferentes países y a lo largo de los años estaremos ante una gran cantidad de jugadores nacidos al final del año que no fueron profesionales cuando merecían serlo. Ese talento mal seleccionado tiene implicaciones éticas, deportivas y económicas. Éticas porque se produce una discriminación por razón de mes de nacimiento; deportivas porque la calidad media de los jugadores será peor; y económicas porque los jugadores tendrán menor valor medio –además de por utilizar recursos para entrenar a jugadores que no merecían la selección–.
A pesar de ser descubierto hace ya cuatro décadas, y tras muchas publicaciones científicas que confirman el efecto, este se sigue produciendo hoy. Sirva como ejemplo una revisión reciente de las canteras españolas, concretamente de los tres equipos de fútbol dominantes en España –Atlético de Madrid, F.C. Barcelona y Real Madrid–: observamos que había 346 jugadores nacidos en el primer trimestre y únicamente 43 entre octubre y diciembre. Un dato no tan sorprendente tras conocer el efecto de la edad relativa.
Jose Torres-Pruñonosa, Profesor de finanzas e investigador sobre gestión deportiva y valor social, UNIR – Universidad Internacional de La Rioja y Benito Pérez-González, Profesor de Gestión Deportiva, UNIR – Universidad Internacional de La Rioja
Este artículo fue publicado originalmente en The Conversation. Lea el original.