Denuncian la adjudicación del Mundial 2034 a Arabia Saudí por la «débil» protección de derechos
Una veintena de organizaciones advierte a la FIFA de los «graves riesgos» que plantea el evento en el país árabe
Una veintena de organizaciones de Derechos Humanos, entre ellas Human Rights Watch (HRW) y Amnistía Internacional (AI), han condenado el anuncio de la FIFA de celebrar el Mundial de fútbol del año 2034 en Arabia Saudí, advirtiendo de los «conocidos y graves riesgos» que plantea este evento en un país «con protecciones de Derechos Humanos tan débiles».
«La FIFA ha decidido hoy ignorar nuestras advertencias y descartar sus propias políticas de Derechos Humanos. La FIFA nunca podrá afirmar que no conocía la gravedad de los riesgos de celebrar su principal evento en un país con protecciones de Derechos Humanos tan débiles», han denunciado 21 entidades en un comunicado conjunto.
Las organizaciones han lamentado que la Copa Mundial de Fútbol se celebre en un país donde «los trabajadores migrantes sean explotados y sometidos al racismo, activistas condenados a décadas de prisión por expresarse pacíficamente, las mujeres y las personas LGBTI se enfrenten a la discriminación legalizada, o los residentes sean desalojados por la fuerza para dar paso a proyectos estatales».
«Basándonos en pruebas claras disponibles hasta la fecha, la FIFA sabe que, si no se llevan a cabo reformas fundamentales en Arabia Saudí, los trabajadores serán explotados e incluso morirán, y aun así ha optado por seguir adelante sin tener esto en cuenta. La organización corre el riesgo de tener una importante responsabilidad respecto a los numerosos abusos contra los Derechos Humanos que se cometerán», ha declarado el director de Derechos Laborales y Deporte de Amnistía Internacional, Steve Cockburn.
Así, aseguran que el evento deportivo «se verá empañado por la represión, la discriminación y la explotación a gran escala». Con la adjudicación de la Copa del Mundo a Arabia Saudí, la FIFA no está actuando en consonancia con sus políticas de Derechos Humanos, han denunciado los firmantes, tildando estas normas de «farsa».
«Sin licitación competitiva, había pocas posibilidades de que se rechazaran las ofertas, independientemente de lo deficiente que fuera la estrategia de Derechos Humanos o de la gravedad del riesgo pendiente. No se consultó a las personas que probablemente se verán afectadas por los torneos, ni se acordaron medidas específicas o vinculantes que garanticen el cumplimiento de las normas internacionales del trabajo o reformas más amplias de los Derechos Humanos», han relatado.
Las organizaciones firmantes, que representan a distintos colectivos –personas LGTB, trabajadores migrantes, sindicatos internacionales, saudíes en la diáspora y aficionados al fútbol–, han hecho estas declaraciones después de que la FIFA haya anunciado este miércoles que el Mundial de Fútbol de 2034 lo organizará Arabia Saudí, tras una votación durante su Congreso Extraordinario donde se confirmó además la sede de 2030 para España, Portugal y Marruecos.