El presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado este jueves que ha firmado una proclamación que reconoce la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental.
En contexto: el mandatario ha anunciado, prácticamente a la vez que reconocía dicha soberanía, un acuerdo entre Marruecos e Israel para establecer relaciones diplomáticas. El gobierno de Marruecos lo ha confirmado y ha asegurado que se abrirán vuelos directos entre ambos países.
Eso sí, el rey marroquí Mohamed VI ha subrayado que estas medidas «no afectan de ningún modo al compromiso permanente y sostenido de Marruecos en favor de la causa palestina» en favor de «una paz justa y duradera en Oriente Medio».
Al respecto, el monarca ha señalado que su país apoya una solución basada en dos estados (Israel y Palestina) viviendo juntos en paz y seguridad, en la que se preserve «el estatus especial de Jerusalén y el respeto a la práctica de los ritos religiosos de las tres religiones monoteístas», pero ya no menciona que Jerusalén sea la capital única e indivisible de Palestina, como se hacía hasta ahora.
Con este acuerdo, Marruecos se convierte en el cuarto país árabe que normalizará lazos con Israel, después de Emiratos Árabes Unidos (EAU), Baréin y Sudán; lo que ha sido auspiciado por la Administración de Trump
Trump también ha justificado su decisión en torno al Sáhara recordando que «en 1777 Marruecos reconoció Estados Unidos» como nación y que, por tanto, es justo que los norteamericanos reconozcan la soberanía del estado marroquí sobre el Sáhara Occidental.
https://twitter.com/realDonaldTrump/status/1337067127455539201?s=20
El conflicto entre el Frente Polisario del Sáhara Occidental y Marruecos lleva existiendo desde 1975, pero el pasado octubre las tensiones se reavivaron cuando un grupo de activistas saharauis bloqueó el paso fronterizo de Guerguerat, que une Mauritania con los territorios ocupados por Marruecos en el Sahara Occidental.
Un mes después, en noviembre, el Frente Polisario daba por roto el alto al fuego de 1991 y decretaba el «estado de guerra» con el reino de Marruecos. Por tanto, la decisión de Donald Trump de reconocer la soberanía marroquí sobre el territorio resulta, en un momento como este, polémica cuanto menos.
«Hoy firmé una proclamación reconociendo la soberanía marroquí sobre Sáhara Occidental. ¡La propuesta de autonomía seria, creíble y realista de Marruecos es la ÚNICA base para una solución justa y duradera por una paz y prosperidad perdurables», ha escrito Trump en Twitter.
https://twitter.com/realDonaldTrump/status/1337067019385057290?s=20
En su proclamación, Trump señala que «EEUU cree que un Estado saharawi independiente no es una opción realista para resolver el conflicto y que una autonomía genuina bajo soberanía marroquí es la única solución viable». «Instamos a la partes a iniciar conversaciones sin retraso, empleando el plan de autonomía de Marruecos, como el único marco para negociar una solución aceptable mutuamente», ha exhortado el mandatario.
«Para facilitar el progreso hacia este objetivo -agrega-, Estados Unidos alentará el desarrollo económico y social con Marruecos, incluyendo el territorio del Sáhara Occidental, y con ese fin abrirá un consulado el territorio del Sáhara Occidental, en Dajla, para promover las oportunidades económicas y comerciales en la región».
En un comunicado, la Casa Blanca revela que Trump ha hablado este jueves con el rey marroquí, Mohamed VI, al que ha reiterado su apoyo a «la propuesta de autonomía seria, creíble y realista de Marruecos como la única base para una solución justa y duradera a la disputa sobre el territorio del Sáhara Occidental, y como tal el presidente (de EEUU) reconoció la soberanía marroquí sobre todo el territorio del Sáhara Occidental».
La postura de España respecto a lo anunciado de Trump ha sido doble: por un lado, la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, ha celebrado la normalización de las relaciones diplomáticas entre Marruecos e Israel; pero ha pedido asimismo que se respeten las resoluciones de Naciones Unidas sobre la cuestión del Sáhara Occidental.
«Queda por resolver la paz entre israelíes y palestinos y queda por resolver la cuestión del Sahara Occidental, y en ambos casos la posición de España es muy clara: respeto a las resoluciones de Naciones Unidas para buscar una vía de resolución también a esas dos cuestiones», ha aclarado la ministra.