Lluís Llach asegura que sugirió a los Jordis subirse a los coches de la Guardia Civil el 20S

El cantautor y exdiputado de JxSí Lluís Llach ha afirmado este lunes en el Tribunal Supremo, donde se celebra el juicio del procés, que él sugirió a los Jordis que se subieran a los coches de la Guardia Civil el 20S para desconvocar la protesta que se organizó frente a la Conselleria de Economía, que obligó a la secretaria judicial a salir por la azotea.

Ya al final de la jornada, ha explicado, acompañó a Jordi Sànchez y Jordi Cuixart –acusados de rebelión–, junto con otros cuatro diputados, entre ellos el presidente el Parlament, Roger Torrent, al escenario que se habilitó para desconvocar la protesta. Pero al bajar, ha señalado, percibió que sus palabras no habían llegado a los concentrados que estaban en primera línea frente al edificio y sugirió dirigirse allí.

«Por deformación profesional y lo siento muchísimo yo dije: ‘El único sitio donde puede ser efectiva esta llamada a la desconvocatoria puede ser encima de estos coches, porque es el único sitio donde os verá todo el mundo'», ha admitido. Una propuesta aceptada por Sànchez -«podemos hacerlo», dijo- y finalmente llevada a cabo por los Jordis tras buscar un megáfono, que costó «unos minutos terribles», según ha explicado.

Con un lazo amarillo en su camisa y gafas y reloj a juego, Llach ha defendido la vocación pacífica de todas las concentraciones organizadas en el marco del independentismo, también la del 20-S, donde aprovechó su condición de «persona conocida» para ayudar a que ésta transcurriese con normalidad.

Tanto él como el resto de los diputados presentes se situaron frente a los concentrados para «hacer de barrera» –una expresión que luego ha matizado– para dar «el mensaje explícito» de que el registro judicial debía transcurrir con normalidad.

Llach, que se ha definido «como ciudadano homosexual, independentista y aspirante a ciudadano del mundo», ha protestado por tener que contestar a Vox y ha afirmado que el 20-S no vio actos de violencia contra los coches, sobre los que se situó una «masa de periodistas» para conseguir buen tiro de cámara.

Y ha dado «fe absoluta» de que los guardias civiles «fueron siempre respetados y que su comportamiento fue ejemplar», al igual que tampoco hubo «ningún problema» con los Mossos: «Es que me caigo aquí, no se de dónde puede venir todo eso». Ha recordado además que asistió a una reunión con el teniente de la Guardia Civil y Jordi Sànchez, «dos personas que sabían que tenían en su responsabilidad que aquello acabase de buena manera».