El Gobierno está abierto a que, ante la subida que se está produciendo en los precios de la electricidad, vuelva a suspender algunos impuestos. Se trata de una medida que ya tomó en 2018, cuando, ante una escalada de precios, suspendió durante seis meses el impuesto a la generación eléctrica del 7% y desactivó el «céntimo verde» para los combustibles destinados a producción eléctrica.
En detalle: la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha dicho este miércoles en el Congreso de los Diputados, en respuesta a una interpelación del PP, que, junto a una «reforma seria de la fiscalidad energética», en la que el Gobierno ya trabaja, «no es descartable que, ante una situación tensa como la actual, haya que volver a hacer lo que ya hicimos en su momento». Ribera ha indicado que el Gobierno no descarta volver a suspender «alguno de los elementos fiscales, con carácter excepcional y provisional», para facilitar a los consumidores hacer frente a una factura que se ha encarecido por el incremento de los costes de los combustibles fósiles, de los que ha dicho que hay que ir deshaciéndose.
La ministra también ha defendido la reforma para minorar los beneficios que están obteniendo centrales no contaminantes anteriores a 2005 por los altos precios de los derechos de emisiones de CO2 y ha apuntado que casi el 90% de la electricidad que se produce en España no tiene que pagar esos derechos, pero sí se beneficia del alto precio que marcan las tecnologías que sí los pagan, como los ciclos combinados que utilizan gas como combustible. Ha añadido que está bien que los inversores tengan rentabilidad, pero que no es razonable que la transición hacia un nuevo modelo energético «la paguen los más débiles».
En 2018, el Gobierno, ante la subida que experimentaron los precios de la electricidad en agosto y septiembre de ese año, adoptó una serie de medidas, entre ellas la suspensión durante seis meses del impuesto a la generación eléctrica del 7% y una exención en el Impuesto de Hidrocarburos para desactivar el gravamen conocido como «céntimo verde» en los combustibles para producción eléctrica. En ese momento, Ribera explicó que la suspensión de esos dos impuestos tendría un impacto en torno al 4% sobre la factura de los consumidores domésticos.
Ahora, Teresa Ribera también ha anunciado que, para paliar los efectos que está teniendo en la industria el encarecimiento de los derechos de CO2, el Gobierno generará en las próximas semanas un crédito adicional de 100 millones de euros para la compensación de esos costes.
Los anuncios de la ministra se producen en un momento de escalada de los precios en el mercado mayorista eléctrico por la subida del gas natural y de la cotización del CO2, que ha coincidido en el tiempo con la entrada en vigor el 1 de junio de un nuevo sistema de tarifas. Para este miércoles, la electricidad alcanza el tercer precio medio diario más caro de la historia, 94,63 euros/megavatio hora (MWh), y se acerca al segundo más alto, 94,99 euros, que se produjo en medio de la tormenta Filomena en enero de este año.