Iberdrola lidera los contratos de luz en España y le saca 215.300 a Endesa

Iberdrola le ha comido la tostada a Endesa en lo que se refiere a contratos de electricidad. La compañía que preside Ignacio Sánchez Galán adelanta en 215.303 clientes de luz a la que dirige José Bogas según los últimos datos disponibles publicados por las empresas.

En concreto, el grupo con sede en Bilbao cuenta con 9,95 millones de clientes de electricidad, de los que 6,61 millones corresponden al mercado libre y 3,33 millones al regulado (PVPC). De su lado, Endesa tiene 9,73 millones de clientes: 4,55 millones en PVPC y 5,18 millones con tarifa libre.

De este modo, Iberdrola se sitúa por primera vez en la historia como la mayor eléctrica de España por número de clientes, como ya adelantó Expansión. Este hito se enmarca en un año en el que el precio de la electricidad en el mercado mayorista (pool) marcó niveles nunca registrados antes y en el que las grandes empresas protagonizaron una ‘guerra comercial’. Llama la atención que entre ambas pierden 300.000 clientes de luz, una cifra que asciende a casi un millón —985.049— teniendo en cuenta los datos desde 2018, cuando estaban por encima de los diez millones.

Hasta la fecha, eran las comercializadoras independientes las que protagonizaban campañas y ofertas más agresivas, pero Iberdrola, Endesa y Naturgy aprovecharon el momento de confusión para captar a clientes en el mercado libre, en el que empresa y consumidor pactan un precio fijo. La primera en lanzarse al barro fue Naturgy con una tarifa liberalizada que aseguraba un precio de pool de 60 euros el megavatio hora durante dos años, que podían contratar tantos clientes actuales como nuevos.

Endesa respondió a los pocos días después mejorando la que denomina su ‘Tarifa Única’, que pasó a calcularse sobre 58 euros el megavatio hora y que se mantendrá fija y sin variaciones también durante dos años. Al igual que la de la compañía que preside Francisco Reynés, esta oferta es válida para consumidores de la PVPC y del mercado libre. Por su parte, Iberdrola tiene en cartera planes personalizados para evitar la volatilidad de precios. También van dirigidos a clientes con PVPC y en el mercado libre (menos de 10 kW de potencia) y garantizan una estabilidad de precios durante cinco años.

Riesgo de precios inflados

Las oscilaciones en el precio diario de la electricidad afectan a los consumidores acogidos a la tarifa regulada, unos 10,5 millones, mientras que están exentos los que están en el mercado libre, unos 16,2 millones, ya que cuentan con un precio pactado con su compañía. Sin embargo, un 60% de los hogares españoles no sabe cuál tiene contratada.

La PVPC cambia cada día y cada hora en función de lo que dicta el mercado mayorista (pool en la jerga). Por ejemplo, la electricidad es más cara en invierno y en verano, ya que hay más demanda energética por el uso de calefacción y aires acondicionados, aunque se ve condicionada por otro factores como los precios del gas y los derechos de emisión de CO2, en máximos durante los últimos meses.

En las tarifas del mercado libre se pueden aplicar descuentos, combinar suministros (luz y gas) y suelen ser mucho más estables de cara al consumidor, aunque también se corre el riesgo de que la empresa infle el precio. Bajo esta última tarifa se sabe de antemano cuánto se va a pagar, pero también presenta la parte negativa de que exige al consumidor una mayor atención a la hora de contratar su tarifa (ya que cada una se adapta a un determinado tipo de consumo) y que puede ser revisada a lo largo del tiempo.

Comercializadoras pequeñas

Así, son las comercializadoras independientes de energía las que están arañando clientes a las grandes eléctricas debido a la mayor presión competitiva, que se ha visto impulsada por la coyuntura creada por la covid-19 y por el encarecimiento de la electricidad. De hecho, firmas como Holaluz alcanzaban los 378.2020 clientes —cifra que espera elevar hasta el medio millón para finales de 2023—.

Entre todos los socios que integran la Asociación de Comercializadores Independientes de Energía (Acie) suma más de tres millones de clientes —cuatro si se tienen en cuenta también a los de gas—.  Feníe Energía, Factor Energía o Enara son algunas de las empresas que están integradas en la patronal, junto con otras con mayor poder financiero como Acciona Energía, Repsol, Cepsa y BP.

Estas compañías son las que más se han visto afectadas por los altos precios de la electricidad y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) tuvo que aliviar las cargas financieras que afrontan con el fin de evitar que muchas entraran en quiebra, como ha sucedido en países como Francia o Reino Unido.