Bajar IRPF, Sucesiones y Transmisiones, clave según los expertos para repoblar Castilla y León

Bajar el tramo autonómico de IRPF y reducir los tipos en Sucesiones y en Transmisiones es clave para relanzar la economía de Castilla y León y detener la diáspora de su población. Son las conclusiones de un informe del grupo de expertos de la Red de Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa (SSPA) al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE.

El informe Una Fiscalidad Diferenciada para El Progreso de los Territorios Despoblados en España detalla los instrumentos que brinda el sistema tributario para atraer habitantes. Ello permitiría apuntalar la economía de las zonas geográficas más afectadas por la pérdida de población. Se trata de esas demarcaciones que en nuestro país se han acuñado bajo el término España Vaciada. La pérdida de población aqueja especialmente a la comunidad de Castilla y León, entre otras.

El estudio propugna el establecimiento de una fiscalidad más favorable y orientada a atraer residentes a las zonas cuya demografía se debilita. Un aviso a navegantes que recobra actualidad a pocos días del dictamen del comité de expertos para la reforma fiscal designado por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

Menor IRPF y Sucesiones

Concretamente, en materia de IRPF aboga por una reducción del tipo de gravamen en la tarifa autonómica. También por una deducción en la cuota del tramo autonómico sobre las rentas de actividades económicas en el caso de los autónomos, sobre las rentas del trabajo asalariado y sobre las rentas de capital de los residentes.

En el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (ITPAJD), los expertos que evacuaron el informe al filo del inicio de la pandemia, proponen una reducción del tipo de gravamen para residentes en las zonas más afectadas por la despoblación, como es Castilla y León.

Lo mismo reclaman para el Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD), una bajada del tipo de gravamen, en orden a preservar la continuidad empresarial ya se produzca la transmisión vía donación o herencia.

Y, en consonancia con la opinión más común de los fiscalistas, demandan también la reducción del Impuesto de Patrimonio para residentes.

Cooperación de las CCAA y el Estado

En este sentido, el grupo de trabajo reclama de los Gobiernos autonómicos un mayor uso de su capacidad normativa. En definitiva, reclaman una recomposición tributaria que generan una discriminación positiva con los emprendedores que mantengan o trasladen su residencia a territorios despoblados.

Recomiendan estos expertos que también colabore el Gobierno Central en el relanzamiento de las zonas que pierden población y que lo haga vía deducciones y bonificaciones en las citadas figuras tributarias así como en el Impuesto de Sociedades para los residentes en los municipios afectados que cumplan los baremos demográficos que la UE admite para designar a una zona geográfica como «escasamente poblada».

Desaconseja el estudio, por otra parte, que se reconstruya el marco fiscal sobre el desvío generalizado de recursos públicos a subvenciones, para evitar chocar con la consideración de ayudas de Estado que contravienen los dictados comunitarios.

La Red de Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa se constituye formalmente en 2016, fruto de la unión de la Confederación de Empresarios de Cuenca (CEOE-Cepyme Cuenca), la Federación de Organizaciones Empresariales Sorianas (FOES) y la Confederación de Empresarios de Teruel (CEOE Teruel), como representantes de las zonas reconocidas tanto por la UE como por el Estado español como «escasamente pobladas».

Postulados tributarios de los partidos

Este informe se torna a las puertas de las elecciones del 13-F en Castilla y León como un decantador esencial sobre la idoneidad de las medidas tributarias que propugnan los distintos partidos que concurren a las urnas el domingo.

Desde una óptica exclusivamente técnica, el programa que más se aproxima a lo indicado por los expertos es el del PP, que propugna -aunque sin cuantificar- una bajada del tramo autonómico de IRPF, deducciones para zonas rurales con mayor riesgo de despoblación, deducciones adicionales para las familias, una rebaja de Transmisiones para las empresas que se establezcan en el medio rural y una exención del tributo para los jóvenes.

También Ciudadanos propone una menor tributación en IRPF, la retirada de impuestos autonómicos a empresas de nueva creación durante los primeros dos años de actividad, la extensión de la tributación favorable de Sucesiones a familiares de segundo grado y ayudas para incentivar la natalidad.  

El PSOE propone la vía de las subvenciones a la compra, alquiler o rehabilitación de vivienda, aboga por fijar incentivos fiscales a la actividad, más lucha contra el fraude y en IRPF propone que el contribuyente pueda elegir el destino de su aportación a proyectos beneficiosos para la región. 

Unidas Podemos propone exenciones en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) y en el Impuesto de Circulación así como incentivos para la apertura de negocios en localidades de menos de 1.000 habitantes. Como contrapartida, pretende crear nuevos impuestos medioambientales y gravámenes adicionales para la ganadería que no afecten al pequeño productor. La formación morada se desmarca totalmente del diagnóstico de los expertos del grupo de trabajo de la Red SSPA al abogar Podemos por una subida del IRPF a las rentas altas y un Impuesto de Patrimonio cuyos tipos también suban en función del volumen del hecho imponible. 

Vox, por su parte, propone rebajar el gasto público, atajar la burocracia, contener o suprimir las subvenciones a sindicatos y patronales y adoptar medidas tributarias y normativas que incentiven el empleo para poder generar recursos públicos que permitan rebajar la factura fiscal.