España y Portugal piden a Bruselas limitar el gas a 30 euros como quería Podemos
Nadia Calviño reprochó hace dos días en Consejo de Ministros a sus socios de Gobierno que hablaran de cifras
España y Portugal han propuesto a la Comisión Europea (CE) fijar un precio máximo de 30 euros el megavatio hora (MWh) para el gas que se usa en la generación de electricidad, según ha confirmado la propia vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, tras días de especulaciones.
De recibir el visto bueno de Bruselas, el precio de la electricidad se situaría entre los 90 y 100 €/MWh. Esta es una de las medidas que mayor impacto tendría para bajar la inflación, en su nivel más alto desde 1985 (9,8%). Según datos de Aege, la asociación que reúne a los grandes consumidores de energía, el precio medio diario de marzo se ha situado en 283 €/MWh, un 523% más que en marzo del año pasado.
Durante estos días el Ejecutivo ha preferido no hablar de cifras concretas y se barajaba un tope a los ciclos combinados de alrededor de 50€/MWh. España y Portugal lograron en el Consejo Europeo del viernes pasado una ‘excepción ibérica’ y ahora el Gobierno no espera recibir el aprobado de Bruselas hasta dentro de tres o cuatro semanas.
La medida también ha provocado un nuevo enfrentamiento entre los socios de Ejecutivo. En concreto, entre la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, y la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra.
La secretaria general de Unidas Podemos reprochó a Calviño que la decisión de no fijar un máximo al gas de 30 euros/MWh como viene defendiendo la formación morada no respondía a criterios técnicos, sino que se trataba de una «decisión política». Belarra ha asegurado que la propuesta está avalada técnicamente por los equipos de Unidas Podemos y finalmente ha sido lo que se ha enviado al Ejecutivo comunitario.
Belarra: «Es la mejor noticia»
«Es la mejor noticia porque es una propuesta que desde Podemos llevamos haciendo varios días. Supondría un tope que de verdad nos permitiría bajar la factura de la luz a costa de los beneficios absolutamente multimillonarios e inmerecidos que están ganando las energéticas y afrontar de manera muy contundente la subida de la inflación», ha dicho Belarra este jueves.
Por su parte, Calviño rehusó hablar de este tema en el Consejo de Ministros de hace dos días. «Me sorprende mucho que alguien tenga una opinión al respecto, la verdad. Es un trabajo que se está haciendo desde el punto de vista técnico para afinar los números», dijo Calviño.
Pues bien, dos días después se confirma la propuesta de Unidas Podemos, que ha adelantado el diario portugués Público y luego ha ratificado Teresa Ribera durante su visita a la comarca de El Bierzo (León). Según el documento presentado a Bruselas, la cifra se trata de un «precio ‘normal’ para tiempos precrisis».
España y Portugal han solicitado que la medida se aplique hasta diciembre. La Comisión dijo en su última comunicación que las medidas deberían ser «excepcionales» y no alargarse más allá del 30 de junio, por lo de que no aceptar la ‘petición ibérica’ tan solo se podría aplicar durante dos meses teniendo en cuenta que está previsto que se apruebe en mayo.
Ribera pide «paciencia y tranquilidad»
«Es un documento previo que responde a las líneas maestras que habíamos trabajado con antelación, como introducir un sistema de doble casación, una en frontera para que las exportaciones de electricidad sean retribuidas al precio que correspondería en ausencia de un mecanismo de ajuste, y una segunda casación, donde se introduce el ajuste y el pago por encima del coste del gas es asignado automáticamente en ese margen que queda de tecnologías mucho más baratas hasta el precio que ha sido retribuido el gas a primera instancia», ha explicado Ribera.
Además, la Titular de Transición Ecológica ha pedido «tranquilidad y paciencia». «Hemos propuesto el precio más barato del gas al que entendemos debería producirse ese ajuste, 30 €/MWh, pero es uno de los elementos técnicos de la propuesta que tenemos que discutir con la Comisión Europea», ha apuntado.
De este modo, cabe la posibilidad de que Bruselas eleve el límite. Todo esto después de que, a principios de marzo, Bruselas recogiera el guante de España y abriera la posibilidad de que los Estados miembro tomaran medidas para limitar el efecto contagio de los precios del gas en los de la electricidad bajo un contexto de «emergencia».
‘Truco’ en el tope
Pero el tope al gas también tiene ‘truco’: el sector espera que sean los consumidores quienes asuman mediante su factura de la luz la compensación a las eléctricas propietarias de los ciclos combinados. Fuentes de Transición Ecológica aseguran que aún así seguirá habiendo un ahorro en el recibo y que se ha establecido así ante la negativa de Bruselas de incurrir en déficit de tarifa.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya dijo ayer en el Congreso de los Diputados que el coste de esta medida sería asumido por el propio sistema energético, es decir, que no conllevará ni subvenciones ni ayudas públicas.
El Gobierno también anunciaba este martes que aplicará la minoración de beneficios caídos del cielo (windfall profits en inglés) a todos los contratos bilaterales que tengan un precio de cobertura superior a los 67 €/MWh y que los fondos recaudados se destinarán a reducir los cargos repercutidos a los consumidores.
En concreto, la medida afectará a todos los contratos nuevos, así como revisiones y renovaciones.En el caso de los acuerdos intragrupo (entre una generadora y una comercializadora de una misma eléctrica) se tendrá en cuenta el precio final comercializado.
Las eléctricas deben entregar mensualmente a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) una declaración responsable que incluya, al menos, la energía mensual sujeta al instrumento de contratación a plazo, la fecha de celebración de dichos instrumentos, así como el volumen, precio y plazo de entrega o liquidación de la energía negociada y comprometida en contratación a precio fijo.
Variación en la factura de la luz. Las oscilaciones en el precio diario de la electricidad solo afectan a los consumidores acogidos a la tarifa regulada (PVPC), unos 10 millones en España, mientras que están exentos los que están en el mercado libre, unos 17 millones, ya que cuentan con un precio pactado con su compañía. En este sentido, las familias acogidas a la PVPC, pagaron el año pasado 229 euros más por su electricidad que en 2020.