Ribera reprocha a Europa el apoyo al gas y la nuclear y anuncia que España no lo apoyará
El Parlamento comunitario ha declarado ambas energías como verdes en el actual contexto de crisis
Nadia Calviño y Teresa Ribera. | Fernando Sánchez (Europa Press)
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha calificado como un «cambio erróneo» el visto bueno del Parlamento Europeo a la propuesta de la Comisión Europea de calificar como taxonomía verde a la energía nuclear y al gas porque, a su juicio, «no es bueno que se intente pasar por verde lo que no es».
Así lo ha indicado Ribera en el debate «La descarbonización de la economía, ¿secuestrada por los combustibles fósiles», organizado por elDiario.es en Madrid, donde ha recordado su postura crítica desde el inicio de esta propuesta de la Comisión Europea.
En su opinión, se trata de un «cambio erróneo», porque confunde «lo que es verde sin riesgo significativo» para el planeta, con que «cualquier cosa es verde», por lo que «no tiene sentido la diferenciación» al incluir a la energía nuclear y al gas, ha zanjado Ribera.
Ribera anuncia que España no se sumará a la nueva taxonomía
Los 27 Estados miembros representados en el Consejo de la Unión Europea todavía pueden rechazar esta taxonomía verde para el gas y la nuclear si antes de la medianoche del 11 de julio se oponen el 72 % de los países (20) que representen al menos al 65 % de la población de la UE, una posibilidad que ha descartado Ribera al considerar «difícil» conseguir un porcentaje de mayoría.
Sin embargo, más allá de la aprobación del Parlamento Europeo, Ribera ha garantizado su intención de que España continúe trabajando con la «taxonomía original» con la que ya «empezamos a trabajar con la primera emisión de bonos de deuda verde».
Por su parte, Laurence Tubiana, presidenta de la Fundación Europea del Clima (European Climate Foundation, ECF, por sus siglas en inglés) y una de las arquitectas del Acuerdo de París de 2015, ha señalado como responsables de esta taxonomía a los grupos de presión («lobbys»), algo que asegura haber observado en países como Francia y Alemania.
Respecto a las políticas climáticas, Tubiana también ha lamentado que «hemos perdido tiempo en los últimos 30 años» al debatir sobre asuntos que «no eran reales», en referencia a los negacionistas de la crisis climática, y ha aseverado que «el cambio climático va más deprisa que nosotros».
