Ribera asegura que el consumo de luz ha caído un 3,7% gracias al plan de ahorro energético
La vicepresidenta tercera también ha avanzado que la ‘excepción ibérica’ ha ahorrado a España 1.383 millones en dos meses
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha asegurado este miércoles que la demanda eléctrica en España ha caído un 3,7% en la segunda semana de agosto en comparación con la primera, gracias a las medidas de ahorro energético que se vienen aplicando en comercios y edificios públicos, como el límite de la temperatura del aire acondicionado y el apagado de escaparates.
Ribera ha subrayado, en rueda de prensa desde Mahón (Menorca), que la cifra -la mitad que fija Bruselas para España hasta primavera- está en torno a la que calculaba el ministerio. No obstante, ha matizado que los datos son «preliminares» y que que surgen de comparar la semana del 1 al 7 de agosto (5.249 GWh) y la semana del 8 al 14 (5.056 GWh) del mismo mes. Si se compara con la semana equivalente del año pasado, la disminución sería del 1,8%.
Además, ha destacado que la respuesta a las medidas ha sido «extraordinariamente positiva» pese a las críticas y el «ruido» que han generado. Partidos como el PP han pedido directamente que se retire el decreto, mientras que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, lo llevará ante el Tribunal Constitucional.
Desde el 10 de agosto, edificios públicos y comercios tienen que cumplir con límites de temperatura y apagar sus luces por la noche. En concreto, mediante el Plan de choque de ahorro y gestión energética en climatización, se limita a 27 grados el uso del aire acondicionado en verano y a 19 grados la calefacción en invierno en edificios públicos, espacios comerciales y grandes almacenes, infraestructuras de transporte (aeropuertos y estaciones de tren y autobús), espacios culturales y hoteles, mientras que a partir de las 22:00 horas se deben apagar las luces de escaparates y edificios públicos. Todas estas medidas estarán en vigor hasta el 1 de noviembre de 2023.
Cierre automático de puertas
Sin embargo, los bares y los restaurantes pueden limitar el uso del aire acondicionado al «entorno de los 25 grados», teniendo en cuenta las recomendaciones de la legislación laboral. Los comercios y establecimientos deberán justificar cuando no aplican el límite de temperatura en el termostato.
Por otro lado, los establecimientos deberán de disponer de carteles, señales o pantallas para informar de las medidas de aplicación que se han puesto en marcha y de cómo contribuyen al ahorro energético. La información deberá incluir la temperatura y humedad. También pueden comunicar otras medidas que estén adoptando voluntariamente y los carteles deberán ser visibles desde la entrada o acceso de los edificios. La fecha de inicio de la medida es el 2 de septiembre y estará vigente, en principio, hasta el 1 de noviembre 2023.
Asimismo, los locales tienen la obligación de disponer de un sistema de cierre de puertas adecuado. No se podrá tener la puerta abierta mientras funciona el aire acondicionado o la calefacción. Esto se aplicará en edificios y locales con acceso desde la calle. En esta medida, no se consideran exclusiones, salvo que la legislación de seguridad que aplique al edificio o local impida cumplirla. Los establecimientos tienen de tope hasta el 30 de septiembre para dotarse de este mecanismo.
El Gobierno ha puesto en marcha una serie de subvenciones para facilitar la modernización de los locales a través de sistemas eléctricos más eficientes. En concreto, la cartera que dirige Ribera ha aprobado una línea de ayudas de 100 millones de euros para las empresas de servicios con la que pretende incrementar el ahorro y la eficiencia energética de cualquier edificio existente perteneciente al sector terciario.
Los espacios comerciales, edificios públicos, espacios culturales y hoteles que incumplan el plan de ahorro y eficiencia energética aprobado por el Gobierno afrontarán multas de 60.000 euros por infracciones leves, de seis millones de euros por las graves y de hasta 100 millones de euros por las muy graves.
Esta batería de medidas se trata de un primer paquete que será completado con el plan de contingencia que se presentará en septiembre. La titular de Transición Ecológica ha afirmado que dentro de este último no se contemplarán obligaciones para hogares e industria. Como ya publicó este medio, la demanda convencional de gas natural, destinada al consumo de hogares, comercios e industrias, bajó en julio un 30% frente al mismo mes de 2021, mientras que en comparación con junio el retroceso se eleva en diez puntos porcentuales.
Ahorro de 1.381 millones por el tope del gas
Por otro lado, Ribera ha avanzado que la ‘excepción ibérica’ ha permitido un ahorro para el país de 1.383 millones de euros en los dos últimos meses, es decir, unos 22 millones de euros al día. El mecanismo, que entró en vigor el pasado 15 de junio, limita el precio del gas para la generación eléctrica a una media de 48,8 euros por megavatio hora (MWh) durante un periodo de doce meses, cubriendo así el próximo invierno, periodo en el que los precios de la energía son más caros.
Ribera ha señalado que el precio medio del mercado mayorista eléctrico (el denominado pool), desde el pasado 15 de junio hasta este 17 de agosto, se ha situado en 143 €/MWh, a los que hay que añadir el coste de la compensación diaria a las gasistas que tiene que ser abonada por los consumidores beneficiarios de la medida, los acogidos a la tarifa regulada (PVPC) o los que, a pesar de estar en el mercado libre, tienen una tarifa indexada.
En este sentido, ha defendido que el precio del pool en España, sin contar el ajuste, ha estado muy por debajo de los niveles de otros países de la Unión Europea como Francia (378€/MWh), Italia (422 €MWh) o Alemania (319 €/MWh). «Hoy prácticamente toda Europa tiene un precio superior a 500 €/MWh)», ha dicho.
Cálculo. La demanda total nacional de electricidad entre semanas no es estrictamente comparable dado que existen factores que alteran las condiciones de contorno cada semana, como son la temperatura y la laboralidad. Así, el Ejecutivo ha tomado los valores de demanda de la primera y segunda semana de 2021 y ha calculado cuál hubiera sido con la misma temperatura, laboralidad y la tendencia estructural al alza o a la baja de la demanda de energía eléctrica en el último año.