Las pensiones en 2023: estos son los cambios a partir del próximo año
Varias de las reformas provienen de la legislación de 2011 y, otras, de la ‘reforma Escrivá’ de este año
La reforma de las pensiones empezará a aplicarse en 2023. | Unsplash
El año nuevo está aún a unos meses de llegar, pero la ciudadanía ya conoce algunos de los cambios que traerá 2023 en el sistema de pensiones. No obstante, estas no serán las únicas modificaciones, ya que hay otros que aún están pendientes de las negociaciones con los agentes sociales y de la política del Gobierno.
De hecho, los cambios que están confirmados hasta ahora no son exactamente de la acción legislativa del Ejecutivo actual, sino que corresponden a la reforma de las pensiones de 2011. Esta surgió para retrasar la edad de jubilación y aumentar los requisitos exigibles a los ciudadanos para poder jubilarse en el contexto de crisis económica galopante del momento.
Según esta reforma, entraría en vigor un sistema progresivo por el que año a año aumentarían los objetivos de la reforma hasta su implantación definitiva. Según aparece recogido en la Ley 27/2011, de 1 de agosto, en la que aparece recogida la reforma, en el año 2023 aumentaría la edad de jubilación: pasará a los 66 años y cuatro meses para todas aquellas personas que no lleguen a 37 años y nueve meses cotizados, dos meses más que en 2022.
No obstante, no cambia la edad de jubilación si se cumple el requisito de cotización, siguen siendo los 65 años. Es más, esto no aumentará en ningún momento de la reforma, que estará implantada de forma definitiva a partir de 2027.
El segundo gran cambio en las pensiones previsto para 2023 afecta al método de cálculo de las pensiones. La Seguridad Social obliga a una cantidad determinada de años cotizados para poder tener derecho al 100% de la base reguladora (es decir, para tener derecho al 100% de la pensión); esa cifra va aumentando de forma progresiva.
En 2023, para poder acceder al 100% de la base reguladora será necesario haber cotizado durante 36 años y medio, medio año más que en el periodo 2020-2022. Estos años continuarán hasta 2026 y corresponde a las siguientes aportaciones a la base reguladora durante estos tramos de cotización:
- Los primeros 15 años cotizados dan derecho a un 50% de la base reguladora.
- Cada uno de los 49 meses siguientes da derecho a un 0,21% extra de la base reguladora.
- Por cada uno de los 109 meses siguientes hay derecho a un 0,19% extra de la base reguladora.
Otros cambios a partir de 2023
A pesar de esto, a partir de 2023 también habrá algunos cambios perceptibles en el sistema de pensiones que proceden de la conocida como ‘reforma Escrivá’. Esta incluye varias modificaciones importantes y sigue retocando diversos aspectos de la normativa.
Un cambio clave es el que tiene que ver con el número de años a tener en cuenta para poder calcular la base reguladora. Aunque en un primer momento hubo especulaciones con un aumento del periodo de cómputo de 25 a 35 años, el propio ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, descartó esta opción y aún no se sabe el aumento exacto.
Algunas alternativas planteadas son la libre elección de los años (o al menos de una parte) por parte del trabajador o la mejora de la integración de lagunas (que permite rellenar con bases ficticias los periodos sin cotizar).
Sea cual sea la opción finalmente elegida, esta reforma tendrá validez a partir de 2023. El Gobierno ya anunció en el texto del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia propuesto a la Comisión Europea para recibir las ayudas a raíz de la pandemia de coronavirus cuál es su compromiso en este aspecto: «Adecuar a la realidad actual de las carreras profesionales el periodo de cómputo para el cálculo de la base reguladora de la pensión de jubilación»
Es más, en el calendario de las reformas a las que se vincula la recepción de los fondos está establecido que «la legislación para la ampliación del periodo de cómputo para el cálculo de la pensión de jubilación» era algo que ocurriría en el último trimestre de 2022 (y empezar a aplicarlo a partir de 2023).
También hay otras dos medidas que están pendientes de aprobación y que van de la mano: destopar las cotizaciones y el aumento de la cuantía máxima de las pensiones. Ambas modificaciones hay que negociarlas con los agentes sociales y, al igual que el resto de cambios, están dirigidas a hacer más sostenible el sistema de pensiones.
Los que sí están ya aprobados y que entrarán en vigor en 2023, fruto de la ‘reforma Escrivá’ son dos cambios. Por un lado, el aumento de la cotización por contingencias comunes, que aumentan del 28,3 a un 28,9% de la base de cotización y serán asumidas, en gran parte, por la aportación empresarial (un 0,5%).
El segundo es la reforma del sistema de cotizaciones de los autónomos, que pasan a un sistema de tramos por ingresos reales. Esto tratará de ajustar las cotizaciones de estos profesionales por cuenta propia para que reflejen su nivel de ingresos de una forma más fidedigna.
Por último, los Presupuestos Generales del Estado traen consigo un último cambio que llegará en 2023. Este es la subida de las pensiones no contributivas al mismo nivel que las contributivas, es decir, teniendo en cuenta el dato medio anual de inflación existente en el mes de noviembre. Así, las personas que cobran estas prestaciones (quienes no tienen derecho a las contributivas por razones de cotización) recibirán esta ayuda para no perder su poder adquisitivo.
Por qué hacer estos cambios en las pensiones
Todos estos cambios tienen un objetivo marcado: fortalecer el sistema de pensiones. Este va a sufrir en los próximos meses debido a, por un lado, la inflación. Las pensiones aumentan en base al Índice de Precios al Consumo (IPC), gracias al nuevo método de revalorización de las mismas aprobado en la ya mencionada ‘reforma Escrivá’.
En segundo lugar está la llegada de las jubilaciones de los trabajadores de la conocida como generación del ‘baby boom’. Esto aumentará el número de pensionistas y, por lo tanto, el importe a pagar en estas prestaciones. Este es del 11,8% del Producto Interior Bruto de España, según los últimos datos de la Seguridad Social.
