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Economía

España es la potencia europea con mayor tasa de trabajadores en riesgo de pobreza

Sólo Grecia, Bulgaria y Rumanía empeoran el dato español de activos con dificultad para cubrir sus necesidades de manutención básicas

España es la potencia europea con mayor tasa de trabajadores en riesgo de pobreza

El presidente de Consejo de Gestores Administrativos de España, Fernando Jesús Santiago Ollero. | Europa Press.

España es la potencia europea que tiene más porcentaje de trabajadores en riesgo de pobreza -el 15,2%-, según el informe Gastos de Supervivencia de las Familias, elaborado por el Observatorio de Gestión Pública del Ilustre Colegio Oficial de Gestores Administrativos de Madrid (Icogam), al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE.

Así, en torno a 3,5 millones de empleados en activo se encuentran en España en situación de pobreza laboral, entendida esta situación como la que padecen aquellos trabajadores cuya remuneración no rebasa el 60% de los ingresos medianos, según criterios de la oficina de estadística europea Eurostat, y que encuentran dificultades para sufragar sus necesidades básicas.

El umbral de pobreza es un indicador que halla el nivel de ingresos situado entre el tramo máximo y el mínimo -en función de las tradiciones, creencias, cultura y costumbres- que deja al individuo en situación de no poder atender al completo sus necesidades básicas.

En 2021, explica el informe, el umbral de riesgo de pobreza para los hogares unipersonales se situó en 9.535 euros, y en las unidades formadas por dos adultos y dos menores de edad, dicho umbral fue de 20.024 euros, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) recabados por los Gestores Administrativos.

Inflación, subida de alquileres y de intereses

El presidente del Icogam, Fernando Jesús Santiago Ollero, explica que la realidad es que existen muchas familias en España con ingresos muy precarios a los que la subida de precios, el alza de los alquileres y la mayor carga de intereses en las hipotecas les ha dejado por debajo del umbral de la pobreza.

En este sentido, Santiago reflexiona que más que quedarse en el debate sobre la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) las políticas deberían anteponer la consecución de empleo estable, de calidad, y arbitrar los mecanismos para contener la escalada de precios de los productos básicos.

Ello, explica Santiago, «no consiste en regular o topar los precios», como propuso la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, respecto de la cesta de la compra. «No queremos una economía intervenida», sino medidas que alienten la creación de empresas y el reforzamiento de la industria en orden a fomentar el empleo, zanja el presidente de los Gestores Administrativos.

Por ello, Santiago reclama un pacto de todos los grupos políticos para sentar las bases del desarrollo económico y apuntalar el Estado de Bienestar y señala que el debate sobre el aumento del SMI no puede aislarse de la coyuntura económica general si se quiere evitar una espiral inflacionista y una pérdida de eficiencia en el mercado laboral.

No en vano, el dato de pobreza laboral en nuestra economía -que afecta al 15,2% de los trabajadores- es el mayor de entre las cuatro principales economías del euro: Alemania, Francia, Italia y España. Tomando el conjunto de los Veintisiete, sólo tres países empeoran el dato español: Grecia, Bulgaria y Rumanía.

Sobre un supuesto de una familia de cuatro miembros con dos hijos menores de edad, el informe de los Gestores Administrativos constata que ese hogar puede caer bajo el umbral de pobreza pese a que los dos adultos sumen ingresos de 2.000 euros, equivalentes a dos salarios mínimos.

En consecuencia, y ante la escalada de la inflación y los costes financieros, el Colegio de Gestores pronostica que la tasa de pobreza laboral crecerá en 2022, a la luz de los indicadores proxy que ya está recogiendo su división de estudios, si bien la hipótesis del estudio se efectúa con un hogar de dos hijos menores y dos adultos

Añade el estudio que España siempre ha rebasado la media europea en este indicador y que, además, ha ido acrecentando la diferencia respecto a la media del resto de Estados miembros.

La situación se agrava

Esta situación, explica el informe, se ha agravado por las consecuencias económicas derivadas de las restricciones por la covid, el actual conflicto de Ucrania, con el consiguiente aumento del precio de la energía y las materias primas, y el colapso del comercio de componentes electrónicos que ha llevado a las economías europeas, especialmente la española, a índices de inflación de hace 40 años. Además, el informe refleja que la subsistencia económica de las familias se enfrenta a un escenario mucho más adverso en las grandes ciudades.

Para elaborar el estudio, el Observatorio de la Gestión Pública se ha basado en datos oficiales ofrecidos por el INE y en costes estimados de alquiler, vivienda, alimentación, transporte, sanidad, enseñanza, ropa y calzado, y otros grupos de la cesta de la compra básica.

El estudio evidencia, además, que ese 15,2% de trabajadores en precariedad económica encuentra especiales dificultades para conseguir financiación, algo extremadamente grave si ello impide acceder a una hipoteca para la adquisición de una vivienda digna. Igualmente, detecta también el informe que la familia tipo de la que trata su hipótesis central también encuentra especiales trabas a la hora de acceder a un alquiler porque el propietario tendrá dificultades de poder obtener un seguro de cobro en caso de temer por algún eventual impago de la renta.

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