Las empresas españolas pierden 487 millones en Argelia tras el giro de Sánchez en el Sáhara
Entre junio y septiembre el tejido productivo español ha dejado de exportar el 77,9% de los envíos registrados en el mismo periodo de 2021
Las empresas españolas han dejado de exportar a Argelia productos por un valor de 486,8 millones de euros desde que este país impuso un bloqueo comercial por el giro político de Pedro Sánchez en el Sáhara Occidental. Los datos de la Secretaría de Estado de Comercio publicados este jueves, y cribados por THE OBJECTIVE, indican que entre junio y septiembre se ha producido un desplome nunca visto en las relaciones bilaterales entre estas dos economías.
Entre junio y septiembre de este año las empresas españolas han exportado solo 138,2 millones, una cifra que se compara negativamente con los 625 millones registrados en igual fecha del año pasado. Un desplome acumulado del 77,9% en estos cuatro meses de bloqueo con una caída progresiva y creciente que ha dejado a septiembre como el peor mes del año, tanto en términos absolutos como porcentuales.
En el comienzo de este curso, las compañías de nuestro país solo han realizado ventas por valor de 16,7 millones, frente los 164,3 millones del año pasado, un 89,8% menos. En junio la caída fue del 61,8% hasta los 66,6 millones, en julio del 81,7% hasta los 28,5 millones y en agosto fue del 79,8% tras registrar exportaciones por valor de 26,4 millones.
Envíos a Argelia
Estos datos confirman las declaraciones de los empresarios españoles, que llevan meses advirtiendo de que las exportaciones a Argelia se han reducido a su mínima expresión. En lo que va de año, los productos más exportados son pasta de papel y papel (99,4 millones), otras grasas y aceites vegetales ( 80,6 millones); materias primas y semimanufacturas de plástico (55,5 millones), fritas y esmaltes cerámicos (50,1 millones), equipos de telecomunicaciones (36,6 millones), material eléctrico (27,4 millones) y combustibles y lubricantes (27,4 millones).
Las relaciones comerciales entre los dos países saltaron por los aires desde que el pasado 8 de junio se suspendiera el Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación con España, firmado en octubre de 2002. Argelia activó todos los resortes comerciales para congelar las exportaciones después de que Pedro Sánchez confirmara en el Congreso de los Diputados su apoyo a la soberanía marroquí frente al Sáhara Occidental, abandonando la histórica neutralidad de España.
El Gobierno argelino instó a sus empresas y bancos a no comerciar con nuestro país y declaró la congelación de las domiciliaciones bancarias de las operaciones de comercio exterior de productos y servicios con origen y destino en España. Es verdad que el 28 de julio se levantaron oficialmente estas restricciones, pero los datos confirman que el bloqueo sigue en marcha generando un perjuicio económico sin precedentes para las empresas españolas.
Situación antes del bloqueo
Según los datos de la Secretaría de Estado y de Comercio, antes del bloqueo las exportaciones de España a Argelia llevaban un buen ritmo. De hecho, si solo se consideran los cinco meses anteriores a la disputa política, las empresas de nuestro país habían aumentado un 8,2% los envíos al país del Magreb. Entre enero y mayo de 2022 se enviaron productos por valor de 844,7 millones frente a los 780,6 millones de igual periodo del año anterior.
Excepto en marzo, en todo el resto de meses se superaron las cifras de 2021. De esta manera, gracias a los primeros cinco meses del año, el Gobierno logra suavizar la cifra de caída de exportaciones a Argelia, que se queda en un retroceso del 30,1% entre enero y septiembre, aunque el verdadero impacto se encuentra en el casi 80% de retroceso acumulado desde el bloqueo.
Antes de esta crisis, los datos de las aduanas argelinas situaban a España como quinto proveedor de Argelia en 2020, por detrás de China, Francia, Italia y Alemania. Sin embargo, los últimos acontecimientos hacen prever que se caerá muchas posiciones en este ranking y que el país dejará de ser un socio preferente del país africano, como venía aconteciendo históricamente.
Importaciones españolas
Lo que sí se han disparado son las importaciones españolas -para las que no hay bloqueo- que han crecido un 62,5% desde la ruptura de las relaciones comerciales y se han duplicado en lo que va de año. Se ha producido una ralentización desde el mes de junio, pero se mantiene un buen ritmo de crecimiento que no tiene correlación con la caída de las exportaciones.
Entre junio y septiembre las compras han crecido desde los 1.565 millones de 2021 hasta los actuales 2.543 millones. En términos anuales, han pasado de los 2.995 millones hasta los actuales 6.031 millones, un espectacular crecimiento del 101,4%. Lo que más ha crecido han sido las importaciones de carburantes, en línea con la crisis energética, que se han llevado 4.711 de los 6.000 millones transferidos.
España importa desde Argelia principalmente gas. En el año 2020, las importaciones de combustibles desde Argelia representaron el 92% sobre el total de importaciones de nuestro país. Con los datos de 2020 -los últimos consolidados- España se situaba como tercer cliente de Argelia para el mismo año, por detrás de Italia y Francia.
Estas cifras suponen que las compañías más afectadas están siendo agroalimentarias como Vicky Foods, tecnológicas como Indra o infraestructuras como Técnicas Reunidas, Abengoa o Sacyr. Por otro lado, el aumento de las importaciones da tranquilidad a las energéticas como Naturgy, Repsol y Cepsa, habituales compradores de hidrocarburos a Argelia y que no han visto ningún efecto en su comercio con este país. Incluso Naturgy cerró un nuevo acuerdo de revisión de precios con Argel hace pocas semanas.