Llorente y Cuenca (LLYC) nombra a Alejandro Romero nuevo CEO Global de la firma
Romero, que hasta ahora dirigía la región América de LLYC, es socio y el segundo accionista de la consultora
El consejo de administración de LLYC (Llorente y Cuenca) ha nombrado a Alejandro Romero como nuevo consejero delegado global de la firma, según ha informado este viernes la consultora.
Romero, que hasta ahora dirigía la región América de LLYC, es socio y el segundo accionista de la consultora, en la que lleva trabajando 26 años.
Con su nombramiento, el cargo de CEO se separa del de presidente ejecutivo. Este último seguirá en manos de José Antonio Llorente. Por su parte, Juan Carlos Gozzer será ahora el encargado de dirigir la organización en América Latina en sustitución de Romero.
La empresa ha destacado que estos cambios buscan reforzar la estructura de dirección de la compañía, así como seguir impulsando la carrera profesional de algunos de sus profesionales «más valiosos» y el gobierno corporativo «ajustado a los estándares de las compañías cotizadas más modernas».
«La creación de la posición de CEO separada de la de presidente ejecutivo supone además un avance considerable en nuestro gobierno corporativo. Teníamos previsto ponerlo en marcha al final del 23, pero mis circunstancias personales aconsejan que adelantemos esa medida y reforcemos el management de la compañía», ha explicado José Antonio Llorente, socio fundador y presidente de LLYC.
Por su parte, el nuevo CEO de la firma, Alejandro Romero, ha destacado que con estos nombramientos se pretende acelerar el plan de crecimiento de LLYC poniendo el foco, sobre todo, en Estados Unidos.
Alejandro Romero es licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense y tiene un máster en Comunicación de Instituciones Públicas y Políticas, también por la Complutense. Comenzó su carrera profesional en LLYC como becario en la oficina de Madrid en 1996 y desde 1998 se encuentra en América Latina, donde lideró la expansión internacional de la firma, desarrollando el arranque de todas las operaciones en la región.