Alemania busca arrebatar a España la pieza 'clave' para producir hidrógeno verde
Su objetivo es convertir a nuestro país en un futuro comprador del electrolizador, que es el aparato esencial para producir el vector energético
Unas horas antes de anunciar de forma pública el gran acuerdo de España con la principal naviera del mundo, Maersk, en Moncloa reconocían la importancia de hacerse con el control de toda la cadena de valor del hidrógeno verde. Un objetivo que apuntaba sobre todo a los electrolizadores, es decir, las máquinas que permiten producir el gas verde a través de un proceso químico llamado electrólisis que separa el oxígeno del hidrógeno. Aunque el objetivo por generar el nuevo gas es un proyecto común de la Unión Europea, la realidad esconde una carrera acelerada de los diferentes países miembros por potenciar sus industrias para lograr una mejora notable en sus futuras balanzas comerciales.
De esta forma, la secretaria de Estado de Asuntos Económicos y Acción Climática, Franziska Brantner, aseguró el pasado jueves durante una breve intervención en un acto en Madrid que Alemania iba a apostar fuerte por la producción de los electrolizadores para, más tarde, exportarlo a otros países, donde mencionaba sobre todo a los territorios miembros de la UE, entre ellos a España. «Son listos los alemanes, nos quieren vender la maquinita«, aseguró uno de los presentes en el acto a este periódico. Una intervención que este alto cargo alemán hizo frente a los consejeros delegados, socios de despachos de abogados e importantes empresarios de las grandes compañías energéticas e industriales de nuestro país.
«Queremos destinar una gran parte nuestra capacidad para la producción y la construcción de electrolizadores porque creemos que habrá escasez de electrolizadores y tenemos que asegurarnos de que habrá una más que suficiente producción de estos, por lo que es uno de los objetivos que estamos buscando. Queremos apoyar no solo el uso y el transporte del hidrógeno, sino también la producción de electrolizadores. Estamos ahora en procesos de sacarlo adelante y tratando de buscar líneas de financiación para esto», apuntó Brantner.
Además, la alemana señaló a los futuros compradores. «Aunque seamos muy exitosos en la producción de hidrógeno, vamos a necesitar importadores. Nuestra prioridad en las importaciones es Europa. Como sabemos, hemos pasado un año duro y hemos aprendido de la experiencia de tener socios que no son nuestros amigos. Tenemos para ello dos criterios: el primero de todos es la diversificación -y que la importación no solo dependa de un actor- y en segundo lugar que las importaciones sean procedentes de nuestros socios porque comparten nuestros valores democráticos. No hay mejores socios que los miembros de la UE. En ese contexto, España, con ese gran potencial en el hidrógeno, será un socio muy importante«.
Brantner diseño con sus palabras la radiografía que hacía Alemania con respecto al mercado del futuro gas verde donde relegaba a España al mero transporte del gas. «Nosotros estamos agradecidos de que nos apoyéis en términos de infraestructura y conexión porque creemos que es necesario para que esto sea posible». Sobre el proyecto de corredor verde H2Med, la secretaria de Estado aseguró que todavía había muchas negociaciones. Sin embargo, añadió: «Soy optimista en cuanto a conseguir un enlace entre España, Francia, Alemania y Portugal. Para nosotros esta es la prioridad, asegurarnos de que conseguimos esta infraestructura troncal».
Alemania se une al H2Med
Sobre esto último, España anunció ayer un acuerdo para que Alemania se una al proyecto de hidrógeno verde H2Med, junto con Francia y Portugal. Un anuncio que refuerza el proyecto tras el gran interés suscitado en Bruselas y después de tener ya detrás a cuatro socios importantes europeos. Según el Ejecutivo, el pacto permitirá «reforzar la seguridad energética y la autonomía energética de la UE en un contexto en el que resulta imprescindible que los europeos seamos solidarios para reducir la dependencia energética» y además, «reitera la ambición de Europa por su neutralidad climática».
El proyecto H2Med estará en funcionamiento en 2030 y se espera que sea capaz de transportar desde España dos millones de toneladas de hidrógeno verde al año, lo que representará el 10% del total consumido por la UE. En 2050 se estima que el 20% de toda la energía en Europa será hidrógeno renovable.
Climáticamente neutra en 2045
Por otro lado, la secretaria de Estado alemana esbozó durante su intervención las líneas maestras del plan de su país. «Alemania ha decidido ser climáticamente neutra para el año 2045 y somos conscientes de que vamos a necesitar hidrógeno para nuestra industria. Necesitaremos nuestro mayor esfuerzo produciendo hidrógeno y cooperación internacional. Para nosotros, el hidrógeno está ahí para la industria, como parte del transporte y para equilibrar las energías renovables volátiles. Tiene muchos propósitos».
«El Gobierno previo ya comenzó con la estrategia del hidrógeno y ahora mismo estamos revisando esa estrategia: viendo quién en la industria lo va usar realmente, aquellos que realmente lo producirán, las infraestructuras, la parte legal, financiera y asegurarnos de que todo va a estar correcto e interconectado. Nuestra ambición es lograr esos objetivos. Estamos improvisando y queriendo mejorar todos los instrumentos que tenemos para ver si necesitamos herramientas adicionales. Tenemos un 62 proyectos elegidos en la última legislatura con 13.000 millones de fondos. Los dos principales proyectos ahora tienen que ser aprobados por la Comisión Europea. En esos dos proyectos queremos tener la cadena de valor completa«, sentenció Brantner.
Por último, la alemana quiso hacer énfasis en la nueva ley aprobada en EEUU e impulsada por la Administración Biden para potenciar el hidrógeno verde en su territorio. «Las inversiones se han encarecido y hay que tener una clara regulación en Europa porque, si no somos capaces, las inversiones se pueden ir a EEUU donde tienen una hoja de ruta clara con la ley Inflaction Reduction Act. Espero que podamos hacerlo».