La serie de Pedro Sánchez sigue sin plataforma de emisión tras un año en venta
Ninguna cadena de televisión quiere exponerse al coste político que podría significar emitir un producto audiovisual de estas características
El pasado 9 de marzo Secuoya Studios y The Pool anunciaron el rodaje de una serie para «sacar a la luz la dimensión más personal y humana de Pedro Sánchez y los trabajadores de La Moncloa«. Un proyecto inspirado en trabajos documentales de características similares que se han hecho en otros países y a cargo del ganador de un Goya, Curro Sánchez Varela. La producción -llamada posteriormente Las cuatro estaciones– prometía además «poner el foco en aspectos más personales y cotidianos, alejada de los argumentos puramente políticos o ideológicos».
Sin embargo, un año después de este anuncio, la producción sigue sin tener cadena de televisión ni plataforma digital que la emita, lo que pone en serio riesgo la viabilidad del proyecto, según ha podido confirmar THE OBJECTIVE. Las razones son las mismas que se argumentaron a este periódico en septiembre del año pasado: nadie quiere exponerse al coste político que podría significar emitir un producto audiovisual con propaganda del presidente de Gobierno y menos tan cerca de un periodo electoral. Por otro lado, tampoco se ve ninguna rentabilidad comercial, ni de audiencias, al proyecto.
Fuentes oficiales de Secuoya indican a este diario que no «pueden hacer comentarios sobre el tema», aunque la versión oficial dentro de la compañía indica que «sigue en proceso de rodaje». Lo cierto es que desde antes de marzo este rodaje ya había comenzado y en septiembre ya se presentó un avance con imágenes editadas del día a día del presidente y de sus colaboradores. En ese momento, se indicó que Las cuatro estaciones comprendería el trabajo de Sánchez desde marzo de 2022 a marzo de 2023, por lo que en teoría quedarían algunos días de rodaje.
Opciones para Pedro Sánchez
Si nos atenemos a estos plazos, la serie de Pedro Sánchez tiene que comenzar su postproducción en abril, aunque es inusual que todo el material ya rodado no haya sido procesado todavía. Lo normal es que una serie de estas características ya tuviese comprometida con alguna plataforma o cadena de televisión y mucho más tratándose de un producto que lleva un año en el mercado. Este diario ya informó de que a mitad de rodaje Secuoya y The Pool habían fracaso en su intento de asegurarse una ventana de emisión, tras realizar infructuosas presentaciones a diferentes cadenas.
Seis meses después, la situación no ha cambiado según revelan estas mismas fuentes de diferentes cadenas y plataformas. En noviembre fue RTVE la que confirmó, ante una pregunta parlamentaria de Vox, que «no tenían ningún interés en emitir un producto de estas características». Una situación similar viven las televisiones privadas en abierto, lo que cierra el círculo hacia plataformas como Netflix o HBO, pero hasta la fecha ninguna se ha pronunciado a favor de emitir la serie de Pedro Sánchez. En un año solo se ha conseguido un acuerdo de distribución internacional con Beta Films.
Los representantes de estas productoras querían tener comprometida una ventana de emisión ya con el primer episodio editado (el de la primera estación de marzo a mayo de 2022), pero esto no ha acontecido. En este sentido, las opciones se estrechan a alguna cadena de TDT residual o alguna plataforma en Internet creada específicamente para su emisión. Tampoco hay que olvidar que Secuoya es dueña de una cadena de TDT en abierto: Ten, que ahora está siendo gestionada por Mediapro y que emite programación familiar y telerrealidad.
Emisión en plataformas
El problema es que el tiempo juega en contra de la serie. En primer lugar, la Ley Electoral impide que un producto de estas características se pueda emitir cerca de las elecciones y las municipales se producirán el 28 de mayo, por lo que prácticamente se bloquea todo este mes en campaña electoral. Por otro lado, tampoco se podría emitir en el mes de diciembre reservado en principio para las elecciones al Congreso de los Diputados.
Por otro lado, si es una serie que habla del día a día de la presidencia de Pedro Sánchez (incluyendo la cumbre de la OTAN o reuniones en Bruselas) debería supuestamente emitirse antes de las elecciones ya que no está garantizada la reelección del presidente de Gobierno. El objetivo inicial es hacer una serie de cuatro episodios de unos 45 a 50 minutos, lo que en emisión lineal semanal requeriría de al menos un mes. Por el contrario, si se lograse emitir en una plataforma OTT solo requeriría una fecha de estreno en la que se subirían todos los episodios de una sola vez para facilitar su emisión.
Por otro lado, la serie estuvo también en el centro de la polémica por el acuerdo firmado por la Secretaría de Estado de Comunicación con Secuoya y The Pool para ponerla en marcha. Según informó este diario, y posteriormente denunció Ciudadanos en el Congreso, este pacto podría incurrir en fraude de ley al presentar indicios de ser «nulo de pleno derecho por ser un negocio simulado».
¿Fraude de ley?
El acuerdo se tramitó como «convenio de colaboración», pero asegurando una remuneración para el Gobierno por ceder sus derechos (que a su vez cedió a organizaciones sin fines de lucro), lo que a juicio de muchos juristas le convierte en un «contrato administrativo«. De haber sido este el caso, el acuerdo tendría que haber seguido todos los procedimientos de contratación pública, con la respectiva publicidad y la posibilidad de que cualquier productora española se presentara libremente al proceso.
Este fraude de ley se consumaría al no existir concurrencia. La ley indica que ante un contrato público debe haber varias propuestas cumpliendo con el pliego de condiciones técnicas y económicas, dentro de las que la que el Estado debe elegir la más conveniente en cuanto a servicios y precio. Nada de esto se ha producido en este convenio, lo que ha dado pie para que se elijan «a dedo» productoras cercanas al Gobierno. No obstante, hasta la fecha nadie potencialmente afectado ha denunciado esta anomalía en la serie de Pedro Sánchez.