El Santander confirma los objetivos para 2023 pese a la tormenta financiera
Botín adelanta que los depósitos del grupo han crecido en los primeros meses del año un 6% y que el grupo ha ganando un millón de nuevos usuarios
El Santander ha confirmado los objetivos previstos para 2023 pese a las turbulencias financieras. La entidad ha informado en un comunicado previo a la junta de accionistas, que su presidenta, Ana Botín, ha informado a la asamblea que la tormenta no ha modificado sus pretensiones para el conjunto del ejercicio.
En la junta celebrada en la mañana de este viernes, Botín ha indicado que «en el primer trimestre, dada la evolución de nuestro negocio en el comienzo de año, esperamos un retorno sobre el capital tangible de alrededor del 14%». Esta rentabilidad sería del 15% si se excluyera el impacto que tendrá el pago del impuesto extraordinario abonado en enero, por un importe de 225 millones.
La presidenta del Santander ha explicado a los accionistas que el grupo espera mantener un ratio de capital de 12% y que la eficiencia operativa se mantendrá se encuentra en línea con lo pronosticado, al igual que el coste del crédito.
Crecimiento de doble dígito de los ingresos del Santander
Botín, de esta manera, se ha mostrado confiado a pesar del pánico que se ha desatado en los mercados a raíz de la quiebra del Silicon Valley Bank y el rescate de UBS. La sacudida, según las palabras, no han impactado al negocio del Santander, ya que éste ha continuado con la senda positiva ganando un millón de nuevos clientes en los primeros meses de 2023.
La actividad de préstamos del Santander, en este periodo, ha crecido un 4% y los depósitos -variable que está en el foco de los inversores tras el estallido de la tormenta- han subido un 6%. Con ello, los ingresos del banco avanzan a doble dígito.
Debido a esta buena evolución, Botín ha indicado de forma categórica que «confiamos en alcanzar a final de año los objetivos para 2023», alejando así cualquier impacto de la crisis financiera en el Santander. De hecho, ha asegurado que el grupo está «muy bien preparado» para los desafíos debido al negocio, la diversificación, la escala y el trabajo realizado en los últimos ejercicios.
En este sentido, ha subrayado que el 80% de los depósitos proceden de particulares y empresas y que la mayoría de ellos están respaldados por los fondos de garantía -en España, el 70%-. Por ello, la financiación del grupo es «estable» en estos momentos de turbulencias.
Botín, de igual manera, ha hecho hincapié en que no solo el Santander sino la banca europea se encuentra con una posición de liquidez y de solvencia, tal y como ha señalado en las últimas semanas el BCE. Y ha felicitado al organismo comunitario como a los reguladores de Estados Unidos y Suiza por haber actuado rápidamente para reestablecer la confianza. «Ha sido fundamental», ha dicho la banquera.
Sin embargo, la presidenta del Santander ha reclamado a las autoridades que aceleren la Unión Bancaria, con la creación de un fondo común en Europa, ya que ésta «sería la mejor respuesta a la incertidumbre con el fin de afianzar la confianza».
La junta aprobará la reelección de Botín como presidenta para los próximos años, al igual que ratificará el nombramiento del nuevo consejero delegado, Héctor Grisi, que tomó las riendas a principios de año. Además, dará el visto a la política de dividendos.
Botín, según lo anunciado en los últimos meses, también ha ratificado un aumento de la retribución a los accionistas. «Nuestra intención es seguir aumentándola», ha manifestado la presidenta del Santander. Una remuneración que alcanza ya los 3.842 millones de euros, tras un ascenso medio anual del 16% desde 2014.