Moncloa rebaja el tono con Ferrovial y da por hecha su salida de España
Fuentes gubernamentales niegan presiones y justifican su carta para «trasladar los dos informes independientes» que «desmienten» a la compañía
El Gobierno niega presiones y parece dar por perdidas las gestiones encaminadas a impedir el traslado de la sede social de Ferrovial a Países Bajos. A 48 horas de que la Junta de Accionistas de la compañía se pronuncie sobre esa decisión, el Palacio de la Moncloa justifica la carta remitida por el secretario de Estado de Economía, Gonzalo García Andrés, al CEO de Ferrovial, Ignacio Madridejos, advirtiéndole de los «posibles riesgos o contingencias», como un intento de informar a los accionistas de la compañía de los dos informes independientes de la CNMV y de Bolsas y Mercados Españoles (BME). A juicio del Ejecutivo, ambos informes «contradicen» los argumentos utilizados por la sociedad cotizada para su traslado fuera de España.
«Es una decisión de la compañía en la que no nos metemos», sostienen ahora en Moncloa, asegurando que «en absoluto» intentan presionar a los accionistas. Pero sí justifican la misiva en el contexto de unas conversaciones con el Ministerio de Economía, y en respuesta a los argumentos empleados por Ferrovial para su salida de España: «No hay una motivación económica y el motivo no puede ser tampoco el de la seguridad jurídica». Según fuentes gubernamentales, se trataba simplemente de dar traslado por parte de economía a estos dos informes independientes (CNMV y BME) que refutaban la versión de Ferrovial y al que este martes ha puesto voz la portavoz del Gobierno.
«No existe ningún impedimento para cotizar en EEUU desde España», sentenció tajante Isabel Rodríguez, abogando por la «transparencia» en la información a los accionistas. En privado, el Gobierno niega también que las presiones se hayan producido directamente con los accionistas de la compañía, con quienes no ha habido comunicación alguna: «No hemos hablado con ninguno de los accionistas. Es una empresa privada, el Gobierno no se mete». No obstante, sí deja constancia de que el traslado de su sede social «no es una decisión unánime de los fondos de inversiones»
El Ejecutivo niega haber recibido una respuesta de Ferrovial a su carta y pasa página de una polémica que da por amortizada, al igual que el respaldo mayoritario de los accionistas a la decisión de la empresa cotizada. Este es un movimiento duramente criticado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien señaló públicamente al presidente de Ferrovial, Rafael del Pino, y sus «intereses particulares» para pagar menos impuestos. «En España hay ejemplos extraordinariamente positivos de grandes empresarios comprometidos con su país, pero desde luego, tras este anuncio, creo que no es el caso del señor Del Pino», dijo cuando se dio a conocer la decisión de la constructora
Pero la sensación que queda ahora es que la presión ha sido en balde y que han de rebajar los decibelios ante la posibilidad de un contagio en el ámbito empresarial. Moncloa niega este extremo, así como que exista temor en el Gobierno ante una fuga de empresas que opten por abandonar su residencia fiscal en España: «Nunca hemos temido un efecto llamada ni un efecto contagio. Para nada… diga lo que diga el PP».
Eso sí, en el Ejecutivo se muestran más cautos que hace semanas respecto a este asunto y se limitan a decir que «el Gobierno lo que tiene que decir es que no existe ningún impedimento para cotizar en EEUU y en España». En este sentido, aseguran que la carta enviada a la compañía «es información relevante que se ha dado conocer» y «no es una advertencia del Ministerio de Economía», y mucho menos una amenaza. Y suaviza aún más el tono Isabel Rodríguez: «Claro que al Gobierno de España le gusta que las empresas españolas tengan aquí su sede en España».