Pascual presenta una botella de leche fabricada totalmente a partir del plástico de otras botellas
Al sustituir el plástico virgen por materiales reciclados, prevé reducir un 28,7% las emisiones de CO2 en la fabricación
Pascual ha presentado una botella transparente de leche fabricada totalmente a partir de otras botellas, es decir, hecha con plástico reciclado, y sin tintas, para que sea cien por cien reciclable y reciclada, según ha informado la compañía de alimentación y bebidas en una nota de prensa.
Pascual ha destacado que es la primera empresa en lanzar al mercado una botella de este tipo y que esta innovación ayudará a reducir sus emisiones de dióxido de carbono (CO2) un 28,7%, al utilizar materiales reciclados en lugar de plástico virgen, que proviene enteramente de materiales fósiles.
En 2023, la compañía prevé devolver al ciclo 7,5 millones de botellas de 1,5 litros, dejando de utilizar 315 toneladas de plástico virgen. Esto evitará la emisión de 395.106 kilos de CO2 cada año, lo que equivale a más de 58 vueltas al mundo en coche o al CO2 absorbido por 4.582 árboles en crecimiento durante 30 años, según ha afirmado.
Además, la ausencia de tintas en esta nueva botella favorece que, una vez reciclada, sus componentes puedan ser utilizados para la fabricación de nuevos envases para alimentación y bebidas, mientras contribuye a reducir la cantidad de residuos plásticos que se generan en el entorno.
Formatos más respetuosos con el medio ambiente
La directora de Negocio Lácteo de Pascual, Natalia Fernández, ha afirmado que están «comprometidos con el cuidado de las personas, el planeta y los entornos» en línea con el concepto ‘one health’, un enfoque integral de la sostenibilidad que reconoce la interconexión entre la salud de los seres humanos, los animales y el medio ambiente.
«Avanzar hacia un mundo cada vez más comprometido es una responsabilidad compartida» y, por eso, «seguimos innovando en formatos más respetuosos con el medio ambiente y adaptados a las necesidades de los consumidores, sin comprometer en ningún caso la calidad de nuestros productos», ha explicado.
Pascual ha señalado que está «comprometida con toda la cadena de valor láctea», desde el productor hasta el consumidor final, para garantizar «un producto de la mayor calidad, que cuide de los entornos y economías rurales, así como del planeta».
En esta línea, la empresa certificó todas sus granjas con el sello de bienestar animal europeo Welfare Quality en 2018, y el año pasado recibió el Premio PRAN a la mejor iniciativa en vigilancia y control del consumo de antibióticos y sus resistencias en el ámbito de la sanidad animal por su Programa de Seguridad Alimentaria, Medio Ambiente, Salud y Bienestar Animal en las granjas que proveen de leche a la compañía.
Asimismo, Pascual trabaja con sus ganaderos en programas de eficiencia productiva para ayudarles a rentabilizar y mejorar su negocio y para contribuir a las economías locales y al mantenimiento de la población en el medio rural.
Con el fin de «dar vida a los pueblos de la España vaciada», también ofrece becas a los hijos de los ganaderos y compra el cien por cien de la leche de origen español, sobre todo de municipios de menos de 40.000 habitantes.