Cataluña acapara ya el 37% del Fondo de Liquidez pese a ser líder en deuda y déficit
Recibe más dinero del Estado que otras regiones, mientras su pasivo es de 84.327 millones, el 33,4% del PIB, frente los 34.821 millones de Madrid, el 13,5%
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès | Europa Press
Cataluña, líder en deuda y en déficit público, ya acumula el 36,7% de la ayuda que aporta el Fondo de Financiación Autonómica, concretamente 6.213 millones de euros -a cinco meses de comenzar el año-. Una aportación que le da el Estado al Govern de Pere Aragonès, mediante los mecanismos de financiación de las administraciones territoriales, según datos del Ministerio de Hacienda.
Cabe recordar que este mecanismo se creó en 2012 por el Gobierno de Rajoy -siendo ministro de Hacienda Cristóbal Montoro, en un contexto de una crisis económica heredada del Ejecutivo de Zapatero-, con el objeto de reducir los volúmenes de deuda comercial de las Administraciones Territoriales a través del Plan de Pago a Proveedores, el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) y, mediante los fondos liberados por el Fondo de Financiación a Comunidades Autónomas y el Fondo de Financiación a Entidades Locales. En el caso de Cataluña, se trata de una cantidad importante de un total de 16.856 millones entre 10 comunidades autónomas, siendo el Govern de Pere Aragonès el primer perceptor de todos, y Andalucía, Cantabria, y La Rioja las que menos reciben de esas diez CCAA.
Asimismo, la administración catalana tiene uno de los mayores déficits públicos autonómicos, pasando de los 903 millones de 2021 (en términos de PIB 0,39%) a 3.816 millones, es decir, un 1,51% de PIB, frente a el 0,71% del PIB que tiene en estos momentos la Comunidad de Madrid, que preside Isabel Díaz Ayuso.
En cuanto a la deuda, y en términos comparados, al cierre de 2022, la deuda de la Comunidad de Madrid ascendía a 34.821 millones, el 13,5% del PIB, mientras que la de Cataluña es de 84.327 millones, (33,4%). En estos momentos, Madrid cuenta con la deuda más baja del conjunto de CCAA, y de hecho se ha reducido 1,2 puntos con respecto a 2021. Así, mientras que en 2023 Cataluña tiene que refinanciar deuda por importe de 10.665 millones, una cantidad que hace inviable su financiación en los mercados de capitales. Madrid tiene vencimientos este año por 2.681 millones.
«488 millones» de deuda histórica del Estado
El pasado mes de abril, el conseller de Derechos Sociales, Carles Campuzano, afirmaba que el Estado tiene una deuda histórica de 488 millones de euros en dependencia con Cataluña, desde que el PP suprimió un mecanismo previsto en la Ley de Dependencia en 2012.
En opinión de Campuzano , «el grueso de la financiación» de las prestaciones a las personas con dependencia corresponde a la Generalitat». En este sentido, el dirigente catalán mantiene que, entre los años 2008 y 2021 Cataluña ha destinado a estas prestaciones 18.000 millones de euros, de los que unos 12.000 han sido aportados por el Govern, otros 3.000 por el Gobierno y 3.000 millones más han correspondido al copago por parte de las familias de los ciudadanos dependientes.
«El sistema no se aguanta, ha quebrado», considera el conseller, quien reclama una «financiación adecuada» para Cataluña, y sostiene que la deuda del Estado con la comunidad asciende a 488 millones de euros desde 2012.
Campuzano también ha vuelto a reclamar el traspaso de la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV), «al que el Estado se niega» a pesar de haberlo transferido al País Vasco y a Navarra.
Cambronero pregunta por la deuda de Cataluña
En el último Consejo de Ministros, el Gobierno de España autorizó un aval de 2.600 millones de euros a Cataluña para formalizar operaciones de deuda a corto plazo. Fuentes del Ministerio de Hacienda consultadas por THE OBJECTIVE, señalaban que este dinero se destinará a atender los vencimientos de deuda a corto plazo del último semestre del año 2023 y formalizar nuevas operaciones a corto plazo de la Generalitat y entes públicos dependientes de la Comunidad.
Pero la respuesta de Hacienda, que también se encuentra en la información publicada por el portal de Moncloa, tras el Consejo de Ministros del 23 de mayo, no ha convencido al diputado del Grupo Mixto, Pablo Cambronero, exdiputado de Ciudadanos, y quien un día más tarde, registraba una pregunta en la Mesa del Congreso de los Diputados, en la que «solicita respuesta por escrito, sobre la autorización del Gobierno al endeudamiento de la CCAA de Cataluña por valor de 2.668,6 millones de euros que se suman a los más de 2.300 millones del año pasado».
En opinión de Cambronero, con quien se ha puesto en contacto THE OBJECTIVE, la respuesta del Gobierno de Pedro Sánchez es insuficiente, puesto que no detalla a qué se destinará ese dinero que sale del bolsillo de todos los contribuyentes, hacia una economía que manifiesta que sus cuentas son insostenibles, cuando además, a fecha de hoy, el Ejecutivo progresista todavía no ha aclarado si Cataluña ha devuelto al Estado la autorización de 2.300 millones de euros que le concedió en abril de 2022.
Esta semana, el consejero de Hacienda Javier Lasquetty, también se pronunciaba para TO sobre la financiación autonómica, concretamente sobre el FLA, y señalaba, que mientras que Madrid solo ha hecho uso de esta ayuda en una ocasión, Cataluña sigue solicitando al Gobierno de España esta prestación, pese a que las cuentas del Govern independentista de Cataluña están quebradas y tiene muchas dificultades para salir a los mercados.
Hacienda, por su parte, confirma a TO que el Consejo de Ministros siempre ha autorizado a las CCAA formalizar operaciones de endeudamiento a corto y a largo plazo. En concreto, el 31 de enero de 2023, autorizó a las comunidades de Madrid, Andalucía, Castilla y León, Galicia, Asturias, Aragón, País Vasco, Navarra y La Rioja.
Más allá de este programa de financiación, las calificación de las agencias crediticias colocan a Madrid en el mismo rating que Tesoro de España por S&P (A), DBRS (A) y Moodys (Baa1), mientras Cataluña se sitúa tres escalones por debajo en caso de Moodys (Ba1) con la calificación de grado especulativo o «bono basura» y, cuatro escalones por debajo en el caso de DBRS (BBB low).
