IAG dejó atrás pérdidas y ganó 921 millones en el primer semestre
Su intención es volver a la capacidad anterior a la pandemia a finales de año
Varios aviones de Iberia en la terminal 4 del Aeropuerto de Madrid-Barajas | Oscar J. Barroso / Europa Press
El ‘holding’ de aerolíneas IAG, que engloba Iberia, British Airways (BA), Vueling y Aer Lingus, registró un beneficio después de impuestos de 921 millones de euros en el primer semestre de 2023 frente a las pérdidas de 654 millones que obtuvo en el mismo periodo del año anterior. Según ha notificado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el beneficio operativo alcanzó los 1.260 millones de euros en este semestre abandonando también las pérdidas del año anterior.
Los ingresos de la compañía se incrementaron en un 45,3%, hasta los 13.583 millones de euros. Los ingresos por pasaje fueron de 11.784 millones de euros, un 55% más, mientras que la facturación del negocio de carga se contrajo un 28,5%, hasta los 603 millones de euros. Por otro lado, los gastos aumentaron un 26,2%, hasta los 12.323 millones de euros. La mayor partida de gastos se corresponde con la de combustible y derechos de emisión, que aumentó un 38,3% y llegó a los 3.550 millones de euros en el semestre.
En concreto, la compañía señala que el coste unitario del combustible aumentó un 5,7% frente a 2022, vinculado a unos precios medios efectivos del combustible más elevados, netos de coberturas, y a los efectos beneficiosos derivados de las entregas de aviones más eficientes a IAG durante los últimos años.
IAG destaca el beneficio trimestral más alto de Iberia, que alcanzó los 307 millones de euros, más de tres veces más que el año pasado, y obtuvo unos ingresos de 1.708 millones de euros (+36%). A 30 de junio de 2023, el grupo contaba con una liquidez total de 15.552 millones de euros, compuesta por efectivo, activos líquidos equivalentes y depósitos remunerados por valor de 12.010 millones de euros, 3.308 millones de euros de líneas de financiación generales y de descubierto concedidas y no dispuestas, y otros 234 millones de euros de líneas de financiación específicas para aeronaves concedidas y no dispuestas.
La deuda neta se ha reducido a 7.600 millones de euros a finales de trimestre frente a los 10.400 millones que acumulaba a 31 de diciembre de 2022 debido al aumento del beneficio y a las entradas de capital circulante estacionales.
Recuperación a los niveles prepandemia
El grupo ha conseguido restablecer el 94% de 2019, medidas en asientos por kilómetro ofertados (AKO, por sus siglas en inglés). Los ingresos unitarios de pasaje del primer semestre fueron un 18,4% superiores a los del mismo periodo del año anterior, con una «fuerte recuperación del tráfcio de ocio y una recuperación más lenta del tráfico de negocios».
El consejero delegado del grupo, Luis Gallego, ha señalado que estos resultados se deben al «buen comportamiento de todas las aerolíneas» y que su intención es volver a la capacidad anterior a la pandemia a finales de año. Asimismo, ha destacado que la demanda sigue siendo sólida. «Los sólidos beneficios desde principios de año nos están ayudando a financiar inversiones para nuestros clientes y a mejorar nuestro balance mediante la reducción de deuda», ha agregado Gallego.
A lo largo del semestre, IAG transportó a 54,3 millones de pasajeros, un 35,9% más, con un incremento del 30,9% en la oferta y del 41,6% en la demanda. El factor de ocupación se situó en el 84,1%, 6,3 puntos porcentuales más.
Aumento de la flota
Durante este semestre, IAG ha recibido once nuevos aviones para British Airways, Iberia y Vueling y espera que el nivel de entregas alcance los 30 para finales de año, incluyendo un avión en régimen de arrendamiento para Level. En total, serían once aviones de fuselaje ancho (seis para BA, cuatro para Iberia y uno para Level) y 19 de fuselaje estrecho para todas las aerolíneas. Asimismo, destaca que el 43% de su flota de largo y corto radio, lo que comprende a 243 aviones, está formada por aviones de nueva generación más eficientes y silenciosos.
El pasado 30 de junio, IAG anunció que había convertido 10 opciones de Airbus A320neo en pedidos en firme, con la opción de convertir algunos aviones en A321neo, un pedido valorado en 1.100 millones de euros. Los aviones se entregarán en 2028 y serán utilizados por cualquiera de las aerolíneas actuales del Grupo para sustituir a los aviones de la familia A320ceo.
Además, este jueves 27 de julio el grupo anunció que ha acordado convertir en pedidos en firme seis opciones de Boeing 787-10 de British Airways. Al mismo tiempo, va a añadir otras seis opciones del 787-10 a su cartera de pedidos de aviones de largo radio. El Grupo ha aprobado también convertir una opción de Airbus A350-900 de Iberia en un pedido en firme. Los aviones en firme se entregarán entre 2025 y 2026 y se emplearán para recuperar la capacidad de las flotas de largo radio de British Airways e Iberia.
Espera recuperar el 97% de la capacidad
La compañía espera que la capacidad del ejercicio completo de 2023 se sitúe en torno al 97% de los niveles anteriores a la pandemia, sujeto a interrupciones del servicio.
La compañía aprecia una demanda fuerte en todo el grupo, especialmente en el segmento de clientes de ocio, con cerca del 80% de los ingresos del tercer trimestre ya reservados. Para el cuarto trimestre ya tienen el 30% de los asientos reservados, algo «habitual» en esta época del año, subrayan.
En cuanto a incertidumbres, IAG tiene en cuenta los posibles impactos de la volatilidad geopolítica y macroeconómica en el precio del combustible y la confianza del consumidor, así como el impacto de factores externos en el entorno operativo, como las huelgas.
