Las financieras de consumo recortan a la mitad su red de sucursales desde la covid
Los establecimientos de créditos cierran desde finales de 2019 el 48% de las oficinas y cuentan ahora con solo 79
Las financieras de consumo han recortado a la mitad la red de sucursales desde que comenzó la covid. Al igual que la banca tradicional, las compañías que ofrecen préstamos para la compra de bienes han disminuido su presencia física para mermar sus costes y adaptarse al entorno cada vez más digital.
Los establecimientos financieros han reducido sus oficinas desde las 152 de finales de 2019 hasta las 79 que tenían a cierre de junio de 2023, según los datos recopilados por THE OBJECTIVE en el Banco de España. Con este descenso, el número de agencias de estas firmas, muchas de las cuales son filiales de los bancos y de los fabricantes de automóviles, ha caído en dicho periodo un 48%.
En 2020, peor ejercicio de la pandemia, las financieras llevaron a cabo el ajuste más acusado, con el cierre de más de 50 sucursales. Unas clausuras que, aunque han bajado en intensidad, han continuado en el tiempo. En la primera mitad de este ejercicio han bajado la persiana a siete de ellas.
En los años previos al estallido del coronavirus, estas empresas que conceden préstamos mantuvieron estable la red gracias al empuje de la actividad, una vez superada las consecuencias de la crisis financiera que se inició en 2008 y se alargó hasta 2013.
Las financieras tuvieron 400 oficinas en sus mejores momentos
El número actual de agencias de los establecimientos de crédito contrasta radicalmente con el que llegaron a tener antes del crash desatado a raíz de la quiebra de Lehman Brothers, ya que por entonces sobrepasaba los 400. Por tanto, en unos 15 años la red de sucursales de las financieras se ha reducido más de tres cuartas partes.
Esta clausuras son mayores a las que han ejecutado los bancos, aunque no con mucha diferencia. Las entidades tradicionales han cerrado desde 2008 dos tercios de las oficinas. Desde la covid la reducción de las agencias, en su caso, se ha sido del 27%. Un ajuste que, en suma, fue materializado en el marco de los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) que puso en marcha el sector para recortar gastos y que afectaron a unos 19.000 trabajadores en 2021 y 2022.
A lo largo de este año, a pesar de que estos procesos están prácticamente superados, los bancos han clausurado otro centenar de oficinas, limitando de esta manera un ajuste que está provocando dificultades de acceso , principalmente, en la España vaciada. Alicante, Cáceres y Palencia han sido las provincias más afectadas por el recorte de sucursales.
Las clausuras de red por parte de las financieras no están provocando una mejora de las cuentas del sector. Los establecimientos de crédito no están levantando la cabeza a pesar de la mejora de la actividad pese a la incertidumbre y la subida de los tipos de interés.
Los resultados de las financieras cayeron en el primer semestre de 2023 un 7% con respecto al mismo periodo de 2022, hasta 386 millones de euros. Los beneficios de estas compañías se está viendo afectado por el aumento de los costes operativos y de las provisiones. En el último año, estas han aumentado en unos 100 millones de euros, hasta los 1.762 millones, pese a que su morosidad está controlada.
A diferencia de lo ocurrido en otros momentos críticos y de problemas económicos, los impagos no han empezado a asomar la cabeza en los préstamos al consumo y, por tanto, golpear a las financieras. En esta ocasión, las insolvencias han comenzado su andadura alcista en las hipotecas. Con el paso del tiempo la morosidad irá repuntando en otros segmentos bancarios.
Los créditos para vivienda con más de tres meses en falta de pago se elevaron en el segundo trimestre un 3,9%, hasta rozar los 12.000 millones de euros (11.823 millones de euros). Con ello, la ratio de dudosos en este segmento ha remontado hasta el 2,3%. La tasa de impagos de las financieras, que llegó a estar en el 7%, se ha moderado hasta el 6,33%, un porcentaje que es muy superior al de las hipotecas, pero que por lo general siempre es mucho más elevado. También supera al de la media del sistema (incluyendo todos los negocios), ya que la ratio se sitúa en la actualidad en el 3,5%.