Las empresas de logística alertan de un desplome de las compras online desde octubre
La cifra de ingresos del comercio electrónico en España caerá este año un 17% respecto de 2022
«En las dos últimas semanas estamos viendo una caída del 8% en el comercio online y en nuestros volúmenes de entrega domiciliaria. Está aguantando el tema editorial», asegura Javier López, CEO de Zeleris, la filial de logística del grupo Telefónica. Una tendencia que también aprecia Álvaro Ruiz de Gordoa, socio director SupplyChange y director de Desarrollo de Negocio, ADER.
Ruiz de Godoa reconoce en conversación con THE OBJECTIVE que ya notaron durante la primera mitad del año síntomas de ralentización pero este tercer trimestre esa ralentización se ha convertido en «retroceso» en la actividad. «Vemos una desaceleración del consumo que no se va a recuperar a final de año ni creemos que en 2024», asegura. Desde sus compañías dan cobertura a las ventas online de plataformas pero también se encargan de los envíos de medio y gran tamaño de empresas retail como Leroy Merlin, IKEA o LG.
«Creemos que detrás de este retroceso están los tipos de interés y la inflación, aunque también un cambio de modelo. No pintan bien las cosas para el e-commerce», destaca el director de Desarrollo de Negocio de ADER. Por su parte, desde Zeleris apuntan que en su compañía experimentaban crecimiento más o menos hasta septiembre. A partir de entonces han notado una ralentización. «En las dos últimas semanas estamos viendo una bajada del 8%», reconoce.
«Aguantamos bien a inicios del año, pero desde septiembre las expediciones y el volumen han bajado», ha añadido Jorge Montero, director de Operaciones de Sending Transporte Urgente y Logística, durante la jornada ‘Ecommerce: claves logísticas en los picos de demanda’ organizada por la patronal logística UNO.
Caída tras el boom de la pandemia
En 2020, a causa de las restricciones que provocó la pandemia, las plataformas online se convirtieron en la única alternativa durante meses para que los ciudadanos realizasen sus compras. Eso supuso un crecimiento acelerado de un sector que en España aún no estaba en el nivel de otros países. «Saltamos de pantalla, pero ahora la situación está cayendo y es difícil que veamos niveles similares», apuntan fuentes del sector.
En este sentido, según el informe El e-commerce en España, publicado recientemente por EAE Business School, la cifra de ingresos del comercio electrónico en España se situará este año en 6.207 millones de euros, un 17% menos que en 2022, cuando ascendieron a 7.469 millones de euros. La subida en el precio de los productos y servicios a causa de la inflación, un menor poder adquisitivo por parte de los consumidores y el aumento del precio del combustible son los principales causantes de la reducción de ingresos este año en el sector, según los autores del informe.
Pendientes de los picos de demanda
No obstante, y a pesar de la tendencia hacia la ralentización que percibe el sector, prevén alcanzar picos fuertes de demanda durante las próximas semanas que palien la situación. Las empresas de reparto gestionarán en este periodo cerca de 108 millones de envíos, a una media de 3,7 millones de envíos diarios y con picos de hasta 4,6 millones los días de mayor volumen, según los datos ofrecidos por la patronal UNO.
Unos datos que suponen un incremento de envíos del 6,8% con respecto al año pasado concretamente durante los días inmediatamente posteriores al ‘viernes negro’, la semana siguiente al Cyber Monday y la semana previa a la Navidad. A pesar de las previsiones positivas del sector para estas fechas puntuales, Francisco Aranda, presidente de la Organización Empresarial de Logística y Transporte de España, advierte que «es vital rentabilizar al máximo esta inercia positiva para hacer frente al deterioro de las expectativas de crecimiento económico» previsto para 2024.
Reducción de la jornada
Desde el sector, también han analizado la medida incluida en el nuevo pacto de Gobierno sellado entre PSOE y Sumar, en el que se plantea una reducción de la jornada laboral a 38,5 horas para 2024 y 37,5 horas para 2025.
A juicio del presidente de UNO, la aplicación de esta medida aumentará aún más la «elevada tasa de paro y será otro freno para incrementar salarios, en un momento marcado por la desaceleración económica». Para el presidente de la logística, «el gran objetivo debería ser mejorar nuestra debilitada productividad. Los análisis económicos nos dicen que en 2022 el PIB nominal por hora trabajada en España era un 76% del valor registrado en la eurozona y solamente el 63% de Alemania».
Ruiz de Gordoa, por su parte, asegura que es siempre buena noticia mejorar las condiciones de los trabajadores siempre y cuando vayan acompañadas por «incrementos de la productividad» ya que si no lo que se consigue «va en detrimento de la producción global».