Bruselas da aire a Sánchez y prolonga más allá de 2026 el periodo para gastar los fondos UE
El Gobierno admitirá además otros programas de financiación como la compra de deuda y capital riesgo
Gonzalo García Andrés, secretario de Estado de Economía, Comercio y Empresas. | THE OBJECTIVE
Finalmente, Bruselas abrirá más allá de 2026 el plazo de ejecución para aquellos proyectos que se financien con préstamos de la Adenda de los Fondos Next Generation. De este modo, la Comisión Europea no aplicará el calendario que ellos mismos estipularon para la pata de las subvenciones o transferencias, cuyo reglamento sí establece que los proyectos habrán de estar concluidos antes de que finalice el año 2026.
En este caso, al tratarse de un recurso financiero de otra tipología, la Comisión aplicará la normativa europea que se ejecuta con el presupuesto comunitario, y que determina que el plazo a contar por la administración bruselense no es la consecución de la inversión real, sino la mera concesión de la financiación.
Así lo aclaró este lunes el secretario de Estado de Economía, Comercio y Empresa, Gonzalo García Andrés, en un acto organizado por la consultora EY, en su sede en Madrid, y a donde acudieron un nutrido grupo de expertos y técnicos en políticas públicas, entre otros especialistas.
El número dos del Ministerio de Economía que dirige Nadia Calviño se refirió en su alocución a las posibilidades exploradas por parte de España para facilitar la financiación de los proyectos europeos, ahora en la segunda fase del Plan de Recuperación de los préstamos que aportarán —más allá de 69.000 millones en subvenciones y 10.200 millones en transferencias— una partida de 83.000 millones de euros. En ese nuevo calendario, España podrá recibir siete próximos desembolsos —25.600 millones hasta 2024, 44.600 en 2025 y 44.300 millones en 2026—, además de una nueva prefinanciación de unos 1.400 millones de euros asociada al capítulo REPowerEU en 2024.
Préstamos y otros tipos de financiación
En su primera intervención, García Andrés detalló la canalización de los préstamos europeos a través de instituciones expertas como el ICO y el BEI, entre otros organismos, dando a conocer las diferentes líneas en el caso del ICO, con 40.000 millones de euros.
La primera de ellas, el ICO verde, dotada de 22.000 millones de euros, irá destinada a facilitar créditos a hogares y empresas privadas y públicas para la realización de inversiones que favorezcan la transición verde, como la generación de energía renovable, la eficiencia energética o la economía circular.
Fue justo en este apartado en el que el secretario de Estado de Economía, Comercio y Empresa profundizó en otras líneas de financiación que irán más allá de la tradicionales acciones bancarias. Algo que más tarde corroboró a THE OBJECTIVE el propio Ministerio de Economía, explicando que, en efecto, también se dará cabida «a instrumentos diferentes como préstamos a través de mediación, préstamos directos, programas de compra de deuda y capital riesgo».
Dentro de ese epígrafe de Líneas ICO, García Andrés subrayó los préstamos que irán destinados a empresas y emprendedores, con una dotación de 8.100 millones de euros, y que irá directa a la financiación de inversiones en el tejido empresarial en condiciones favorables, línea en la que el turismo contará un compartimento de 1.000 millones de euros, así como el Fondo ICO Next-Tech, que apoyará al tejido empresarial con una dotación de 4.000 millones de euros para seguir facilitando el crecimiento de las startups españolas en tecnologías disruptivas, promoviendo la innovación y la digitalización y el Fondo para aumentar el parque de vivienda social y de alquiler asequible dotados con 4.000 millones de euros.
Gonzalo García Andrés también abordó ante los presentes las futuras reglas fiscales que impondrá la Comisión Europea, y que, según señaló el economista y técnico del Estado, se conocerán en breves días, en el marco de la presidencia de España del Consejo Europeo, y posiblemente con una cláusula de flexibilidad.
«Arrancada de caballo»
Por otro lado, desde Barcelona, este lunes el presidente de Pimec y vicepresidente de Conpymes y de la SME United (patronal europea de pymes), Antoni Cañete, lamentó que en la gestión de los fondos europeos Next Generation ha habido «arrancada de caballo y parada de burro», en buena medida por la burocracia, por lo que pidió más protagonismo de las pymes en su gestión.
Durante un debate de la jornada del Partido Popular Europeo Camino a la recuperación, en Barcelona, afirmó que «necesitamos más y más Europa» en la buena dirección, poniendo como ejemplo la lucha contra la pandemia.
«Posiblemente no hemos tenido nunca en Europa una apuesta tan grande como los Next Generation», razón por la que valoró la oportunidad y la responsabilidad que supone mancomunar una deuda de 700.000 millones. Sin embargo, señaló que esas ayudas europeas «no son una repartidora, es una inversión que debe amortizarse, es decir, hacerla en la buena dirección», solicitando así más protagonismo para las pymes, «que son el 99,8% de empresas en España», recalcó.
