Un tercio de trabajadores se jubila antes de los 65 con una pensión media de 1.766 euros
Gracias a los incentivos de la reforma, las jubilaciones demoradas suponen hasta octubre un 25% más que las de 2022
La reforma de la pensiones impulsada por José Luis Escrivá, pero sobre todo la aprobada en 2013, han contribuido a aumentar la edad media de jubilación, que ya se sitúa en 65,1 años. Pese a todo, incluso con las penalizaciones previstas y los premios al retiro demorado, todavía hay un tercio de jubilaciones anticipadas.
Los datos que facilita el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones analizados por THE OBJECTIVE muestran que hasta 90.665 trabajadores se han retirado de forma anticipada. Mientras, 176.745 lo han hecho al llegar ordinaria de jubilación. Esta se estableció en 2023 en 66 años y cuatro meses cuando se acrediten menos de 37 años y nueve meses cotizados. Para poder retirarse a los 65 si penalización es necesario presentar al menos 37 años y nueve meses de carrera laboral.
La estadística del ministerio muestra también que los jubilados anticipados reciben pensiones considerables y a una buena parte le corresponde la máxima. Esto hace que la penalización resulte rentable. De hecho, sus pensiones medias se sitúan en 1.766 euros, 463 más que los trabajadores que se retiran a la edad ordinaria. Normalmente en este grupo está buena parte de los autónomos, que cotizaciones reducidas se ven obligados a prolongar su vida laboral.
Pensiones y jubilaciones involuntarias
Al detalle, las tablas que aporta la Seguridad Social muestran que 11.719 empleados se jubilaron anticipadamente, pero de forma involuntaria. Estos retiros se pueden realizar incluso cuatro años antes de cumplir la edad legal de jubilación. Es decir, dependiendo de los años cotizados, a los 61 años o a los 62 y cuatro meses. Por su parte, algo más de 21.000 personas accedieron al retiro parcial. Este se inicia después de cumplir los 60 años y se simultánea con un contrato de trabajo a tiempo parcial.
Tras la reforma de Escrivá, ha habido un aumento importante de los retiros demorados, para los que se contemplan incentivos. Solo hasta octubre, 22.000 trabajadores se acogieron a este mecanismo. Esto supone un 25% más que los optaron por esta vía en 2022.
Tasa de dependencia
Para aproximarse al contexto actual de las pensiones, KPMG ha elaborado un Estudio sobre la situación de las pensiones en España. En el informe, citando al Instituto Nacional de Estadística, se destaca que la tasa de dependencia de la población mayor de 64 años será de 53,73%. Esto quiere decir que, por cada pensionista, habrá 1,86 personas cotizando para poder financiar su pensión.
El estudio destaca que el envejecimiento poblacional y la falta de relevo generacional pone en elevado riesgo la continuidad del actual sistema de reparto. «La inversión de la pirámide de población por el aumento de los estratos más envejecidos va a verse acentuada a causa de la generación del baby boom«, señala. Los boomers son la generación más numerosa, llegan a la jubilación con sueldos elevados tras largas carreras de cotización. Algunos ya han desembarcado en el sistema en los últimos años, pero en las próximas década se producirá la mayor entrada de pensionistas al sistema que jamás se ha producido.
Salario y prestación
En España, la pensión bruta reconocida por la Seguridad Social supone un 73,9% de los ingresos brutos percibidos antes de acceder a la jubilación. Según datos de la OCDE, la tasa de reemplazo para salarios medios en España es en la actualidad del 73,9%, una de las tasas más altas de los países de la OCDE donde la media se sitúa en el 51,8%. Tal promedio se conforma en un 42,2% por prestaciones públicas y en un 9,6% por prestaciones complementarias, derivadas de esquemas de previsión
social obligatorios, con notable alcance en el total de la población.
La tasa española deriva en un 100% de las pensiones del sistema de Seguridad Social, dada la poca representación de los esquemas privados complementarios.
Gasto e IPC
Mientras y debido en parte al incremento de las pensiones ligado al IPC, el pasado octubre se destinó al pago de las pensiones contributivas la cifra récord de 12.075,3 millones de euros. Esto supone un 10,9% más que en igual mes de 2022. Los nuevos pensionistas tienen prestaciones mayores que las que recibieron los que causan baja. Además, las altas superan desde hace tiempo a las bajas. Los nuevos pensionistas llegan con 157 euros más que los que abandonan el sistema.
El gasto en pensiones se sitúa ya en el 11,6% del PIB en 2023, solo una décima por debajo del dato registrado en 2022 (11,7% del PIB). En octubre se han abonado 10.085.672 pensiones contributivas, casi un 1,3% más que hace un año, a cerca de 9,13 millones de pensionistas.