Sánchez afirma ahora que «no hay prisa» para enviar a la UE el subsidio por desempleo
El trámite parlamentario necesitará más tiempo y es posible que el proyecto ley no se apruebe hasta primavera
Este lunes, el presidente del Gobierno se ha enmendado a sí mismo. Después de asegurar la semana pasada que la oposición ponía en riesgo el desembolso de 10.000 millones de euros de los fondos Next Generation, por votar en contra de los tres reales decretos presentados en el Congreso de los Diputados, de los que dos fueron aprobados gracias a la abstención de Junts -a cambio de una serie de prebendas-, Pedro Sánchez ha admitido este lunes que el Ejecutivo llevará como proyecto de ley el decreto sobre el subsidio que tumbaron los cinco diputados de Podemos.
Ahora, ha señalado el presidente, «hay tiempo» para sacar adelante la medida para la recepción de dichos fondos europeos. Un trámite mucho más lento, pues incluye un periodo de enmiendas de las fuerzas políticas, de manera que la resolución del proyecto de ley se podría retrasar hasta la primavera.
Así lo dijo Sánchez en una entrevista en RNE cuando se le preguntó qué va a hacer ahora el Ejecutivo con las medidas que iban en dicho decreto y que son necesarias para recibir parte de los fondos europeos comprometidos.
Cabe recordar que, el pasado miércoles, el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, reclamó a los diputados que apoyen sin «politiquerías» la convalidación de los decretos anticrisis, alertando de que rechazarlos supondría perder 10.000 millones de euros de los fondos europeos. Sin embargo, ahora, apenas cinco días después, el jefe del Ejecutivo reconoce que «hay tiempo» para sacar adelante la medida para la recepción de dichos fondos, aunque espera que «cuanto antes» puedan sacar adelante esta medida.
Un proceso más largo
El anuncio de Sánchez llega después de que la pasada semana el decreto de reforma del subsidio fuera rechazado por los cinco diputados de Podemos, que se sumaron al PP y Vox en su voto contra el texto.
La formación morada, en su defensa, alegó que contiene un «recorte» en la pensión futura de los perceptores del subsidio para mayores de 52 años, ya que progresivamente incorporaba una reducción en la sobrecotización que el Estado realizaba por estas personas.
Por su parte, y después, desde el Ministerio de Trabajo explicaron que esa sobrecotización era «un parche» que se aprobó cuando el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) era «de hambruna» con el PP, lo que ya no sucede, pues este indicador ha aumentado en casi un 50% en los últimos cinco años, sin contar el 5% de revalorización acordado entre Gobierno y sindicatos para 2024.
Tras este varapalo parlamentario, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, adelantó que «de forma inmediata» convocaría a los agentes sociales para abrir una negociación y volver a llevar el texto al Parlamento, aunque no aclaró en ese momento si sería como real decreto o como proyecto de ley, que conlleva un proceso más lento pero permite que se puedan incorporar enmiendas de los grupos de la oposición.