Más de la mitad de la alta tecnología sanitaria en Cataluña y Baleares está en hospitales privados
El sector privado cuenta con el 52% de los equipos de resonancia magnética y 43% de los de mamografías
La distribución de la alta tecnología sanitaria en hospitales públicos o privados presenta grandes diferencias dependiendo de la comunidad autónoma. Mientras que en La Rioja o Cantabria casi el 100% de estos equipos se encuentra en centros públicos, en Cataluña o Baleares más de la mitad se hallan en los hospitales privados.
Así se desprende del último Observatorio del sector sanitario privado 2024 presentado por la Fundación IDIS con datos del Ministerio de Sanidad. Según el informe, Cataluña, Baleares y Navarra son las comunidades con mayor porcentaje de equipos privados (datos de 2022). En Cataluña, el 55% del equipamiento de alta tecnología (como mamógrafos o equipos de resonancia magnética) se encuentra en hospitales privados. En las Islas Baleares la distribución es similar: 53% en centros privados vs. 47% en centros públicos; y en Navarra, 49% privados vs 51% públicos. Madrid y Canarias también tienen altos porcentajes de equipos en centros privados, 44% y 42%, respectivamente.
En el lado contrario, La Rioja, Cantabria o Extremadura. La primera cuenta casi con el 100% de estos equipos (88%) en hospitales públicos, Cantabria con el 86% y Extremadura con el 84%. En Andalucía, Castilla y León, Murcia, Castilla La Mancha y Aragón, siete de cada diez equipamientos de alta tecnología están en hospitales pertenecientes al Sistema Nacional de Salud.
El 43% de los de mamografías, en centros privados
«La inversión y la actividad económica generadas por las entidades privadas en el sector de la salud no solo estimulan el desarrollo industrial, sino que también impulsan la innovación y la adopción de tecnologías avanzadas, posicionando a la salud como una piedra angular en la economía moderna», señala Juan Abarca, presidente de la Fundación IDIS, en el documento, donde se analiza detalladamente la aportación del sistema privado al sistema público.
Por equipos, según se desprende del Observatorio de la entidad que aglutina al sector sanitario privado, la privada cuenta con el 52% de los equipos de resonancia magnética (RMN), el 50% de los de litotricia (LIT), y 43% de los de mamografías (MAMO). Por el contrario, la mayoría de los aceleradores de partículas (75%) y de los tomógrafos por emisión de fotos (75%) se encuentran en el sistema público. En cuanto a las salas de hemodinámica, de tomógrafos por emisión de positrones, de TAC y angiógrafos seis de cada diez están en los hospitales públicos.
Plan Inveat
Ante esta situación, con el objetivo tanto de renovar los equipos de alta tecnología más antiguos y obsoletos como de ampliar el parque tecnológico del SNS, el Gobierno –con fondos europeos destinados al Plan Inveat– ha destinado 796 millones de euros entre 2022 y 2023 para la adquisición de 847 equipos de alta tecnología de titularidad y gestión pública en centros, también, de titularidad y gestión pública.
Concretamente, las tecnologías renovadas han sido: aceleradores lineales, tomografía axial computerizada (TC), resonancia magnética, gamma-cámara, equipos de hemodinámica, angiografía vascular, angiografía neurorradiológica, tomografía por emisión de positrones (PET), tomografía por emisión de positrones y TAC (PET-TAC) y equipo de braquiterapia digital.
Por comunidades autónomas, el reparto quedó, de más a menos equipos, de la siguiente forma: Comunidad de Madrid (140), Andalucía (137), Cataluña (101), Comunidad Valenciana (78), Galicia (76), Canarias, País Vasco y Castilla y León (40 cada una), Castilla-La Mancha (34), Murcia (33), Aragón (28), Extremadura (22), Baleares (21), Cantabria (19), Asturias (16), Navarra (13), La Rioja (8), Ministerio de Defensa (3) e Ingesa (2)
A final de 2023, el anterior ministro de Sanidad, José Miñónes, informó que ya se había completado la instalación de la totalidad de los más de 800 equipos del Plan de Inversiones en Alta Tecnología (Inveat) en hospitales de todo el Sistema Nacional de Salud, con más del 90% en funcionamiento.
La obsolescencia tecnológica sanitaria
Anterior a la ejecución del los fondos del plan Inveat, el 60% de los equipos instalados en los hospitales españoles tenía 10 o más años de antigüedad; un 30% entre 5 y 10 años y, sólo un 10%, menos de 5 años, contraviniendo las recomendaciones internacionales. El Comité Europeo de la Industria de IT, Radiológica y Electromédica (COCIR, por sus siglas en inglés) fija en un máximo del 10% los equipos disponibles en cada centro con edad mayor de 10 años respecto al total.
La Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin) está trabajando actualmente en actualizar su informe de 2021 sobre el perfil tecnológico hospitalario tras la ejecución del plan. No obstante, recientemente, señalaban a THE OBJECTIVE que el Plan Inveat se había desarrollado «satisfactoriamente»: «Esperamos que tenga continuidad con nuevas fases y que abarquen a otras familias tecnológicas igual de importantes para seguir revirtiendo esa obsolescencia».