Sánchez pide a las empresas subir el sueldo a los trabajadores y «defender la democracia»
El presidente señala que «debemos hacer que el trabajo sea una experiencia más saludable y satisfactoria»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reclamado a las empresas mejoras en las condiciones laborales y salariales de sus trabajadores y les ha pedido su «implicación» para defender la democracia «como el único sistema que es capaz de aunar justicia social con libertades civiles y con crecimiento económico».
«Debemos pagar mejores salarios, reforzar la formación, flexibilizar los horarios y hacer que el trabajo sea una experiencia más saludable y satisfactoria», ha señalado el presidente en la clausura de la asamblea anual del Instituto de la Empresa Familiar (IEF), en el Teatro Real de Madrid.
Además, les ha animado a que aprovechen la «bonanza actual» que las empresas están registrando en sus cuentas de resultados y también en términos agregados la economía española, para invertir en su futuro como empresas y en el del país. Les ha instado también a «recompensar a los inversores y accionistas de manera justa», al tiempo que modernizan y fortalecen las bases del tejido productivo y de la sociedad.
Para ello, Sánchez ha asegurado a los socios del Instituto de la Empresa Familiar que el Gobierno de España «será aliado» y estará del lado de las compañías que quieran ser más competitivas por la vía del talento y de la innovación.
El presidente del Gobierno ha agradecido a los empresarios su contribución a que España esté creando «cuatro de cada diez nuevos empleos de la Unión Europea» y esté alcanzando el récord de más de 15 millones de trabajadores con un contrato indefinido. «Gracias por vuestra contribución y la de todo el tejido empresarial a que tengamos una economía cada vez más robusta como acreditan todos y cada uno de los indicadores económicos», ha destacado.
En este sentido, ha puesto en valor que España es de los grandes países de la Unión Europea el más abierto a la inversión extranjera directa según la OCDE, por delante de la principal economía europea, Alemania, también de Francia o Italia. Esto ha permitido a la economía española crecer un 2,5% el año pasado y un 0,7% en el primer trimestre del año, de acuerdo con los recientes datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
De hecho, el presidente ha destacado que esta misma semana, el Banco de España pronosticó que la economía va a duplicar o más que duplicar este año el ritmo de crecimiento medio de la zona euro, con un alza del Producto Interior Bruto (PIB) superior al 1,9%. «Estamos en un gran país, somos un gran país. Hay grandes motivos para ser optimistas sobre el futuro de nuestro país y, sobre todo, creo que es muy importante subrayar el protagonismo de la empresa familiar, del tejido productivo y también de los trabajadores en este optimismo ante el futuro que tenemos por delante», ha remarcado.
Aun así, el presidente se ha fijado como objetivos la mejora en el funcionamiento de los servicios públicos de empleo para lograr acompasar las demandas de nuevos perfiles laborales con la recualificación en la formación necesaria de los trabajadores y también se ha propuesto reducir el paro estructural en el país.