El turismo náutico se desinfla: caen un 19% las matriculaciones de barcos de recreo
El contexto económico de incertidumbre en el ámbito internacional está empezando a pasar factura al sector
El auge del mercado náutico se desinfla. Las matriculaciones de embarcaciones de recreo comenzaron a crecer intensamente tras el estallido de la pandemia y han estado durante los últimos tres años en niveles muy altos. Sin embargo, este ‘boom’ parece haber llegado a su fin. El mercado náutico ha registrado un total de 1.540 matriculaciones de embarcaciones de recreo entre enero y abril de 2024, 351 registros menos que los efectuados en el mismo período del año pasado, casi un 19% menos.
Una reducción que afecta sobre todo a los segmentos de motos náuticas y embarcaciones hasta 8 metros de eslora, según el último Informe del Mercado de Embarcaciones de Recreo Enero-abril 2024, editado por ANEN, la patronal del sector. Unos datos que muestran también que las motos de agua y las embarcaciones menores, hasta 6 metros, son las más afectadas por el descenso de matriculaciones, con una caída del 22% en el acumulado de este año. Los segmentos de esloras intermedias, desde 8 hasta 16 metros también continúan perdiendo matriculaciones pero de forma menos acentuada que en el período anteriormente computado.
Hay varias razones que explican los datos de este primer cuatrimestre en el mercado de embarcaciones de recreo, según la ANEN. «Por una parte, el mercado ha tendido a estabilizarse tras dos años de crecimiento bajo el efecto pospandemia», apunta Jordi Carrasco, director general de ANEN, en declaraciones a THE OBJECTIVE. Pero, por otro lado, hay un contexto económico de «incertidumbre en el ámbito internacional, también en el conjunto de mercados europeos que afecta a las esloras pequeñas y medianas, precisamente el mercado más importante para la náutica de recreo en España», añade.
Estabilidad tras boom por la covid-19
El turismo náutico despegó a partir de 2021 y se situó entre las opciones para disfrutar de las vacaciones de verano con mayor crecimiento. Navegar alquilando un barco se puso de moda entre los turistas que buscaban huir de las aglomeraciones y optar por un mayor distanciamiento social durante la pandemia. Ha sido desde entonces una experiencia que ha escalado posiciones en España. Pero el crecimiento se ha frenado.
«Se ha estabilizado en términos de matriculación de nuevas embarcaciones. Pero es indudable que efectivamente, tras la pandemia, hemos disfrutado de unos veranos en el agua, a bordo, con muchos nuevos clientes experimentando el placer de navegar», asegura el director general de ANEN. Carrasco defiende que esa afición a la náutica que se despertó durante esos años se mantiene y que el frenazo se debe fundamentalmente a la incertidumbre por el contexto económico. «Y eso es bueno ya que el mercado puede reactivarse en cuanto el contexto económico disipe las dudas que pueden afectar a la compra de nuevos barcos», añade.
Se salvan las embarcaciones grandes
Dentro de los datos de caídas generalizadas, resisten las grandes esloras. Concretamente los barcos mayores de 16 metros mantienen un buen comportamiento y crecen un 33% hasta abril de este año. Las embarcaciones de este tipo, de mayor eslora, se corresponden con el mercado náutico más exclusivo que, como todo mercado afín al lujo, es el que menos afectado se ve por los vaivenes de la economía. «Hay que matizar que este segmento de embarcaciones mayores de 16 metros de eslora es el que menos peso tiene en el mercado náutico español, pero desde luego es el más cualitativo», destaca Carrasco. En el primer cuatrimestre de este año se han matriculado cuatro embarcaciones más que en el mismo período del año pasado (16 barcos frente a los 12 matriculados en el mismo período del año pasado).
Por zonas geográficas, los datos a la baja afectan en mayor o menor medida a todas las provincias, siempre con mayor incidencia en aquellos territorios costeros que son también los que mayor peso tienen en el mercado náutico nacional. En el periodo enero-abril de este año, las Islas Baleares volvieron a los datos positivos con dos matriculaciones más que las registradas en el mismo período del año pasado (+0,60%). En el litoral norte, se mantienen en positivo La Coruña, cuyas matriculaciones de embarcaciones de recreo crecieron un 30%, Cantabria (+28%), Asturias (+23%) y Vizcaya (+11%).
Perspectivas positivas
A pesar de que los datos reflejan desde finales del año pasado cierta ralentización, en el sector siguen mostrándose optimistas ya que la temporada de actividad comercial en la náutica -en lo que se refiere a venta de embarcaciones- se acelera en el periodo que va de marzo a abril. «Muchas de esas operaciones se han iniciado en el otoño previo, durante la temporada de salones, donde las marcas presentas sus nuevos modelos», explican a este diario.
Por otro lado, en el mercado de alquiler (chárter náutico), la mayor actividad se produce de junio a septiembre, en los meses de verano como tal, que es cuando los turistas náuticos más navegan, aunque se observa que «el mes de octubre también está siendo importante en esta actividad debido a que los otoños son muy agradables en nuestro país y permiten alargar la temporada». Con todo, y ante unas expectativas de datos récord de turistas internacionales, en el sector prevén que este verano la náutica vuelva a estar entre los planes de vacaciones en el mar más solicitados. «Las empresas de chárter están avanzando datos positivos en cuanto a reservas de barcos de alquiler y esto hace suponer que volveremos a ver nuestras costas con familias y grupos de amigos que eligen disfrutar del mar a bordo», añade.