Las exportaciones españolas siguen a la cola de las grandes economías tras caer un 3,5%
Entre enero y abril se realizaron envíos por 127.420 millones, registrando la segunda peor cifra interanual de la década
Las exportaciones españolas siguen en negativo en el primer cuatrimestre del año. El Informe Mensual de Comercio Exterior del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, elaborado por la Secretaría de Estado de Comercio y cribado por THE OBJECTIVE indica que entre enero y abril – las últimas cifras disponibles- se acumularon envíos por valor de 127.420 millones de euros, un retroceso del 3,5% interanual. Estamos, además, ante la segunda cifra negativa de la década para este periodo y la más baja tras el desplome del 12,6% registrado durante 2020, en plena pandemia.
El Gobierno recibió esta semana los datos de marzo con gran satisfacción, resaltando el crecimiento del 15,8% para abril (hasta los 33.991 millones de euros) y destacando que fue el máximo histórico para este mes. Lo que omitió fue que esta cifra no logró revertir el desplome anual que en el primer trimestre ya acumuló una caída del 9%.
Es verdad que las cifras siguen siendo altas y que se registra el segundo máximo acumulado, pero también es cierto que se está todavía muy lejos de los datos de 2023 y que se detiene una tendencia ascendente que se ha mostrado imparable en los últimos tres años, con crecimientos de casi dos dígitos.
Exportaciones en el mundo
Del mismo modo, pese a que el desempeño de abril ha estado por encima del crecimiento mundial, en el acumulado anual España sigue siendo la de peor desempeño entre las grandes economías globales. Entre enero y abril, la zona euro y la Unión Europea redujeron sus exportaciones un 2,1%, 1,4 puntos por encima de nuestro país. En el caso de Reino Unido, retrocedió apenas un 0,2%, mientras que Francia se quedó en el 0%, Italia en el 0,3% de mejora y Alemania en el 0,6% de alza.
Fuera del continente, las exportaciones han tenido mucho mejor desempeño, con crecimientos del 1,4% para Estados Unidos, del 4,9% para China y del 8,7% para Japón. Los movimientos globales indican que España se queda rezagada del resto del continente y del mundo y que su retroceso solo se equipara con países europeos con menor crecimiento y PIB que el nuestro.
Si se contabilizan los últimos 12 meses (mayo de 2023 a abril de 2024), el análisis tampoco favorece a España. El dato indica que las exportaciones retrocedieron un 5,3%, la mayor caída desde el retroceso del 9,4% en 2020. A nivel mundial, solamente Reino Unido registra una peor cifra con un desplome acumulado del 6,7%, pero en la Unión Europea la caída fue del 4,5% y en la zona euro del 5%. Mejor lo llevan las grandes economías del continente, con Alemania perdiendo un 2,2%, Italia un 1,6% y Francia un 0,4%. En este mismo periodo, Estados Unidos retrocedió un 2,6% y Japón mejoró un 4,2%.
Exportaciones en 2023
Se ha producido una ralentización mundial del comercio internacional, pero los datos demuestran que este efecto se está dejando sentir mucho más en la economía española. De hecho, desde el segundo trimestre del año pasado se han producido retrocesos sucesivos en las exportaciones y este mes de abril es el primero en el que se registran cifras anualizadas en positivo.
El sector exterior español ya se frenó en 2023 por primera vez desde el desplome de la pandemia, ya que sus exportaciones se redujeron un 1,4% ( 5.519 millones menos que en 2022) y las importaciones un 7,2%, por el incierto contexto internacional, la ralentización del comercio mundial, el desplome de los envíos y la inversión, las tensiones geopolíticas, la bajada del crecimiento y las políticas monetarias restrictivas.
Es por ello por lo que la clave es ver la evolución a partir de ahora. El Gobierno se prepara a subir su previsión de crecimiento del producto interior bruto (PIB) hasta el 2,5%, después de que todos los grandes organismos internacionales elevaran sus previsiones de este año. Se supone que en este nuevo cuadro económico las exportaciones volverán a tener un comportamiento positivo, ya que en los últimos cursos se ha constituido en uno de los pilares de la mejora del PIB.
Guerra de aranceles
El problema es que las incertidumbres internacionales amenazan con volver a irrumpir en el transcurso de la segunda parte del año, con la guerra de Gaza y la de Ucrania enquistadas y sin fecha de término. Por otro lado, las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China y a su vez las de la Unión Europea con Pekín, que podría derivar en una guerra de aranceles, del coche eléctrico y de productos alimentarios, podría tumbar las previsiones más optimistas del Gobierno.
Una disputa en la que además España está en el centro, ya que después del anuncio de la Unión Europea de subir hasta un 60% los aranceles a los coches eléctricos chinos, Pekín respondió con una investigación antidumping sobre ciertos productos porcinos importados del bloque comunitario. Un mercado en el que nuestro país es el principal exportador al país asiático.