Agricultura se gasta 75.000 euros en un informe que solo han consultado 34 personas
El número de descargas hasta finales de junio fue de 51, por parte de 34 usuarios
El ministro de Agricultura y Pesca, Luis Planas | Archivo
El ministerio de Agricultura ha gastado 75.000 euros para la elaboración de un informe sobre digitalización del sector que apenas han descargado una treintena de usuarios. Así se desprende de una resolución de transparencia a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. En concreto, en dicha resolución, la Dirección General de Desarrollo Rural, Innovación y Formación Agroalimentaria resuelve que el estudio La transformación digital del sector agroalimentario vista por sus profesionales, es una de las actuaciones realizadas en el marco del Convenio entre el ministerio y el Grupo Cooperativo Cajamar para la creación de un observatorio de digitalización Código seguro de Verificación.
En el marco de ese convenio, tanto el grupo Cajamar como el ministerio adquieren una serie de compromisos. La realización de este estudio es precisamente una de las obligaciones de Cajamar (cláusula cuarta del Convenio), según dicha resolución. Un informe cuyo coste asciende a 75.000 euros y que está publicado desde el pasado 3 de junio de 2024. El número de descargas hasta finales de ese mes fue de 51, por parte de 34 usuarios. Además del estudio, también está disponible un resumen, cuyo número de descargas en ese mes fue de 28, por parte de 21 usuarios.
Encuesta a 3.500 agricultores
Para elaborar el estudio, de 428 páginas, se realizó una encuesta dirigida a mujeres y a hombres del sector primario. El formulario utilizado contenía tanto respuestas abiertas como cerradas y su cumplimentación se realizó durante los meses de junio a octubre de 2023. La recolección de datos se llevó a cabo por vía online y telefónica.
Según describe la propia metodología del informe, se obtuvieron datos de casi 3.500 mujeres (29,7%) y hombres (70,3%) del sector agroalimentario, recopilándose más del 80% de las respuestas por vía telefónica. Este tamaño muestral otorga a los resultados de la encuesta una precisión del 95% y un error menor del 5%. En las preguntas se profundiza en el conocimiento de su opinión sobre diversos «aspectos de esa transformación digital de la actividad, como las tecnologías de mayor relevancia, sensórica, uso y transferencia de datos, sistemas de registro y trazabilidad, formación y vías de información sobre las innovaciones», tal y como explica el ministerio en su página web.
«Nos parece muy bien el título, pero no es que desde Unión de Uniones no tuviéramos conocimiento de la elaboración de este informe, es que no tenemos conocimiento de ningún agricultor o ganadero que haya participado en el mismo. Y mira que eso es raro, que de las 3.500 encuestas que han hecho no tengamos conocimiento de ninguna», asegura el coordinador estatal de Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, Luis Cortés en conversación con THE OBJECTIVE.
Efectividad del informe
Cortés añade que, entrando en el fondo y la forma las preguntas de la encuesta, y teniendo en cuenta la edad media de los trabajadores del sector primario en España, es muy posible que estos no tuviesen claro el contenido de la misma debido a los nombres «tan técnicos utilizados». «Nos parece un poco irreal, de los muchos informes que hay intrascendentes. Luego después no sirven para nada, ¿qué consecuencias se han derivado de este informe?», se pregunta el agricultor. «Es ganas de perder dinero», añade otra fuente del sector a este diario.
El propio informe, en sus conclusiones, reconoce que las personas consultadas «se refieren a productos y servicios tecnológicos concretos en lugar de a las tecnologías que están detrás de su funcionamiento, lo que podría ser indicativo de cierto desconocimiento sobre cómo operan las innovaciones».
Un millón al año en informes semanales
Por otro lado, tal y como publicamos hace unas semanas en THE OBJECTIVE, el ministerio de Agricultura gasta también anualmente 1.016,16 miles de euros en los informes de coyuntura del sector que publica semanalmente. Se trata de unos informes, fundamentalmente sobre precios de productos agrarios, que se publican desde 2005 y que, a pesar de ser importantes para el sector, apenas tienen 9.029 descargas.
Unos informes que a veces no son todo lo exactos que el sector demanda, según asegura Jesús Anchuelo, agricultor de cereal y secretario general de la organización agraria UPA en la Comunidad de Madrid. «Los precios unas veces se ajustan a la realidad y otras no. Unas veces sirven y otras veces no», asegura. Depende también de las circunstancias en las que se encuentren los mercados. Por tanto, a juicio de Anchuelo, estos informes «a veces sirven como referencia para ver si se hacen contratos por debajo de esos precios, pero 100% fieles no suelen ser», ya que en muchos casos son precios «que no están ajustados al mercado».
