La consejera del Banco de España señalada por Cuerpo: «Hay que hacer mejores análisis»
Arnal y el ministro acudieron a la presentación del informe de EY sobre autonomía estratégica, pero no llegaron a coincidir
De dcha., a izgda., la viceconsejera de Industria de la Junta de Andalucía, Ana Vielba; Judith Arnal, investigadora principal en CEPS y María Abascal, directora general de la Asociación de la Banca. | THE OBJECTIVE
Este lunes tuvo una agenda económica desbordante. A primera hora, el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, se reunía con el presidente de CEOE, Antonio Garamendi, en Génova, 13, para mostrarle su Plan de Conciliación, en el que se incluye la discutida bolsa de horas. Más tarde, el dirigente gallego mantenía un encuentro con el secretario general de Comisiones Obreras, Unai Sordo, con el mismo objetivo: insistir en que el Partido Popular es una formación política con orientación social que no quiere llegar tarde a los debates que preocupan a los ciudadanos, explican fuentes del PP a THE OBJECTIVE.
Entre un encuentro y otro, la consultora EY Insights (con la colaboración del Real Instituto Elcano y la CEOE) presentaba en su sede en Madrid un informe analítico sobre los retos de La empresa española ante la autonomía estratégica europea y las decisiones y pasos que ha de ir dando si quiere ganar en competitividad. La jornada reunió a académicos, ejecutivos, empresas, expertos independientes, políticos y periodistas, y en ella tuvo lugar una mesa de debate con Judith Arnal, la consejera del Banco de España a la que hace apenas unos días el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, llamó a su despacho para pedirle que dimitiera y dejara su silla libre para otra persona.
Arnal aprovechó una de sus intervenciones, concretamente una hora y diez minutos antes de que el titular de Economía subiera hasta la planta 20 de este mismo espacio, para clausurar la presentación del informe de EY Insights. Con decisión, la investigadora principal del CEPS y el Real Instituto Elcano señaló: «Hay que mejorar las regulaciones y hacer mejores análisis» en pro de la autonomía estratégica de nuestra economía. Asimismo, subrayó que «tampoco se puede culpabilizar de todo a la UE». A su juicio, muchas veces los países «acaban introduciendo requisitos nacionales a las directrices», lo que acaba convirtiéndose en «una maraña regulatoria», y esto implica «dificultades para las pymes en un país como España, que es un país de pymes».
Minutos después, Cuerpo recogió el guante, ya sin la presencia de Arnal -en ningún momento llegaron a cruzarse-. El ministro de Economía también se refirió a las pymes y les ofreció el laboratorio de la competitividad, con el que se persigue «aumentar la financiación en efectivo, reduciendo costes y mejorando el acceso». «Este es uno de los principales problemas de las pymes y por eso ponemos sobre la mesa avanzar en un sistema europeo de calificación crediticia, esperando poder adelantar esto en los próximos meses y dar una solución específica», destacó. Además, el ministro Cuerpo lamentó que la UE tarde casi 19 meses en aprobar medidas, por lo que, como el resto de participantes, también pidió reducir tiempos.
Pausa regulatoria
Arnal fue defendida en esta reciente polémica con Carlos Cuerpo por el nuevo gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá. En opinión de la consejera, en Europa no hay una visión común y eso hace que no sepamos a estas alturas qué va a pasar con las empresas chinas que quieren venir a nuestro continente. «No hay consenso y tampoco sabemos qué inversiones queremos, además con un espacio fiscal con absoluta descoordinación, como se puede ver con los semiconductores, con una mala regulación. Por tanto, mantuvo, «autonomía estratégica, sí, pero con facilidades públicas para poder operar».
De «pausa regulatoria» habló María Abascal, directora general de la Asociación Española de Banca, en la mesa moderada por Juan Pablo Riesgo Figuerola-Ferretti, socio responsable de EY Insights. Abascal manifestó que, después del covid y de la guerra de Ucrania, «deberíamos pasar a un momento de tranquilidad o de pausa regulatoria para ayudar a la autonomía estratégica de nuestras empresas» que tan duramente tienen que competir con China.
«Hay que evitar solapamientos, ya que los tiempos regulatorios son de un mínimo de dos años y medio, y ese es mucho tiempo si queremos ser más ágiles», afirmó. Además -remarcó Abascal-, necesitamos más transparencia en las decisiones supervisoras y ayudas fiscales que no discriminen a los competidores.
Por su parte, la viceconsejera de Industria, Energía y Minas de la Junta de Andalucía, Ana María Vielba, arrancó su participación en el debate aclarando que el gobierno de Juan Manuel Moreno Bonilla ya ha hecho los deberes que ni Europa ni España han hecho hasta ahora. La Junta ha realizado un diagnóstico, así como una ejecución de actuaciones encaminadas a simplificar la burocracia, seguir negociando en el ámbito del diálogo social y apostar, al mismo tiempo, por la innovación y la universidad.
Vielba señaló los recursos de la comunidad andaluza: además del turismo, el sol y el viento, sus puertos como el de Algeciras, la logística y el talento que se está aglutinando alrededor de sus universidades y escuelas de ingenieros.
En ese sentido, destacó la riqueza de las minas de Sevilla, la apuesta eólica y por el hidrógeno, el desarrollo de Airbus en Puerto Real (Cádiz) y la colaboración con las empresas tecnológicas chinas, no sin demandar mayor seguridad jurídica para poder actuar ya. Mientras, tal y como recordó Abascal, la brecha que Europa tiene en inversiones con respecto a China es de 800.000 millones de euros; es decir, el 5% del PIB europeo anual. Apremió a la colaboración público-privada en el mix de medidas fiscales y mejor regulación, con una normativa estable, predecible y simplificada.
La CEOE sin Garamendi
La ausencia de Antonio Garamendi generó comentarios. Se cayó de la agenda en el último minuto, aunque según ha podido saber THE OBJECTIVE, nada tuvo que ver su abandono con la reunión que mantuvo con Feijóo, pues ésta terminó antes. Marta Blanco, directora de Relaciones Institucionales de la CEOE, tomó el relevo del presidente de la organización empresarial para decir que «las empresas necesitan las mejores condiciones para acceder a los mercados exteriores en términos de inversión, en términos de productos y de servicios, pero también necesitamos una diversificación geográfica de nuestros suministros, precisamente para tener una industria europea más resiliente».
Añadió Blanco que, «la Unión Europea no solo cuenta con un elevado grado de dependencia exterior con respecto a las fuentes de energías fósiles, sino con todas aquellas materias primas que son necesarias para la transformación digital y para la transición verde».
25 empresas y 30 expertos
El estudio de EY Insights ha identificado entre las principales vulnerabilidades de la UE su dependencia energética exterior del 62,5%, la reducción a la mitad del peso de los proveedores locales en la nube, la concentración en China como origen del 80% de las importaciones extracomunitarias de activos para antibióticos y que EEUU es el destino del 62% del gasto europeo en material de defensa.
Este trabajo ha sido realizado por Chus Escobar, socia responsable de Sector Público y de Financial Accounting Advisory Services; Juan Pablo Riesgo EY España, socio responsable de EY Insights y Socio de People Advisory Services e Ignacio Niño, Senior Advisor, con la colaboración de Miguel Otero Iglesias y Agustín González-Agote, del Real Instituto Elcano. En él han participado 25 de las mayores empresas y asociaciones sectoriales españolas, junto con un consejo asesor compuesto por más de 30 expertos del sector público, la academia y la empresa privada. El estudio insta a la creación de un Consejo de Seguridad Económica y Autonomía Estratégica, así como al refuerzo por parte de las empresas de sus capacidades de análisis y previsión de riesgo político y geoestratégico, entre otras medidas.
