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La publicación de cómics se duplica en España impulsada por el manga y la cultura japonesa

El crecimiento de las plataformas de streaming y los videojuegos han facilitado la proliferación de nueva forma de acercarse a este arte

La publicación de cómics se duplica en España impulsada por el manga y la cultura japonesa

Portadas de Cómic | Waldemar (Unsplash)

El sector editorial se rodea de agua turbulentas que, aún viviendo su crecimiento récord en plena pandemia, se ha visto obligado a hacer frente a numerosos retos y desafíos. No obstante, el cómic  -ese relato explicado mediante viñetas que contienen ilustraciones-, parece defenderse con autoridad gracias al crecimiento creativo, social y económico.

Las cifras de ventas de las editoriales no son públicas, pero se puede corroborar el buen momento que está viviendo el sector del cómic consultando el número de títulos que se publican cada año. Según Guía del Cómic, publicación de gran importancia en el sector dedicada a la recopilación de datos de la industria, el número de novedades publicadas en 2022 fue de 4.415, suponiendo un 15% más que el año anterior y más del doble que hace diez años.

En 2013, apenas 2100 obras vieron la luz, por lo que podemos observar como la innovación, los especialistas y la inversión han supuesto el foco clave para el crecimiento masivo del sector. Para ello, las empresas han seguido caminos facilitados por la digitalización, como la apertura de nuevos mercados, las publicaciones generalistas o las temáticas renovadas en los formatos novedosos -plataformas de streaming (versión anime y animación de las historias)-.

«El cómic se ha convertido ya en una fuente importante de éxitos en cine y televisión, pero también se ha convertido en habitual que éxitos de la industria del libro, cine, series de TV, videojuegos o incluso juegos de mesa se lleven al cómic en una explotación secundaria. A nivel editorial el aumento de la oferta en términos absolutos ha sido espectacular, pero también ha venido acompañada de un incremento de la diversidad de los contenidos y del perfil de las editoriales que publican cómic: cada vez hay más editoriales literarias que están incluyendo cómics en su catálogo, especialmente en cómic infantil y en el segmento de novela gráfica para adultos, cosechando éxitos apreciables», explica José A. Serrano, director de Guía del Cómic, a THE OBJECTIVE.

El mayor evento del cómics de nuestro país, el salón del Cómic de Barcelona, reunió a 110.000 personas el pasado mayo de 2022, en su regreso a la presencialidad, acercándose a las cifras pre pandemia (118.000 en 2019). Por su parte, el Salón del Manga citó a 163.000, agotando todas las entradas en cada una de las cuatro jornadas, superando, con creces, las 11.000 personas, que suponían el récord de asistencia de la edición prepandémica.

El Salón del Cómic de Valencia también acogió la entrega de los Premios Antifaz. Jorge Gil (Europa Press)

Producción de cómics en España

Si bien en estos últimos años, en España se ha producido y publicado más que nunca, las obras nacionales no llegan al 10% del mercado. Esto se debe, en su mayoría, a la revolución tecnológica del sector, permitiendo a los artistas dibujar, diseñar o colorear desde su casa, enviando las páginas digitalizadas a sellos europeos o americanos, donde obtienen muchos más ingresos.

Además, el mercado ha establecido razones, también, que dificultan la proliferación de nuevos estadios de actuación. Es por ello que, según Guía del Cómic, más de la mitad del cómic distribuido en España -unos 3.100 títulos- viene de Japón o EEUU. 

Además, las traducciones japonesas y estadounidenses son las más aceptadas. Los mangas -provenientes de Japón– y los cómics de MARVEL y DC -de Estados Unidos- son aquellos con mayor volumen de producción y distribución. Mientras que en 2013, las ventas de mangas y cómics de superhéroes americanos suponían cerca del 50%, en la actualidad ya rondan el 65%, es decir, cerca de 2.700 títulos.

«El manga y el anime son una puerta de entrada, un catalizador para que la gente se interese por la cultura japonesa. Ya no solo nivel de entretenimiento, sino porque encontramos ejemplos como la gastronomía, que fue interés de mucha gente por verla animada y dibujada en las obras», comenta Marc Bernabé, traductor de manga y divulgador de cultura japonesa, a THE OBJECTIVE.

Estos hechos han llevado a la industria del cómic en España a superar su propio récord en 2022, con un cerca de un total de 4.500 títulos diferentes y 130.000 euros en ventas, según los datos publicados por la Asociación Cultural Tebeosfera.

El manga y la japonización cultural

En 2012 apareció la polémica cuando la Real Academia Española (RAE) definió el manga como «género de cómic de origen japonés de dibujos sencillos en el que predominan los argumentos eróticos, violentos y fantásticos». La Academia se vio obligada a rectificar por las críticas, definiéndolo como «cómic de origen japonés».

«En España siempre hemos tenido una influencia muy directa de Hollywood, pareciendo que fuera de nuestro país solo existía la cultura estadounidense, o, a lo sumo, europea, y ahora con el auge del manga y del anime la gente está descubriendo una cultura nueva. En Japón, la cultura española está representada con figuras como Dalí y Gaudí, el fútbol, la gastronomía o el flamenco -entre otras cosas-. Obviamente España no es solo eso, así como Japón no es solo manga y anime, pero las influencias -intercambiando las culturas- son muy positivas», expresa Bernabé.

El consumo de manga y anime -adaptaciones audiovisuales de los cómics japoneses- como un producto de entretenimiento se ha generalizado en los últimos años. Este gusto por lo japonés, lo oriental, nació en los adolescentes de los 90, con los primeros productos audiovisuales del país nipón (Oliver y Benji, Mario Bros etc.), y se ha establecido dentro del imaginario colectivo casi como un producto propio -a pesar de no haber perdido su identidad-.

«Es una industria que tiene el cómic muy presente y es el origen de muchos de sus éxitos más importantes. Y además lo hace con una característica muy importante que se hecha en falta en muchas adaptaciones occidentales: el anime suele ser muy fiel argumental e incluso estéticamente al cómic original, por lo que un éxito en animación suele traducirse de manera orgánica en un aumento importante de las ventas del manga que adaptan. Esa característica, unida a la presencia generalizada de animación japonesa en plataformas de streaming de implantación masiva como Netflix o Amazon Prime Video ha hecho el resto», argumenta Serrano.

El mercado español está dominado por tres editoriales, las llamadas Big 3, que acaparan más del 60% de las novedades publicadas: Planeta, Norma e Ivrea. La más grande, a nivel de producción, es la editorial Planeta -considerada la empresa insignia del Grupo Planeta- que cuenta con «superventas» -como Dragon Ball, One Piece, Naruto o My Hero Academia– con el control de venta del 50% de las mismas, aproximadamente.

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