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Macroeconomía

El drama de los Perte: todavía queda la mitad por repartir y no hay interés en las empresas

El Gobierno empieza a asumir que buena parte de los créditos de los ‘Next Generation’ tendrán que devolverse a la UE

El drama de los Perte: todavía queda la mitad por repartir y no hay interés en las empresas

El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, responsable de la mayoría de los Perte. | Mateo Lanzuela / EP

La ejecución de los Perte ha sufrido un importante frenazo cuando queda menos de un año para que expire el plazo para gastarlos. Los datos de la herramienta Elisa indican que todavía quedan por repartir 23.340 millones de los Next Generation adjudicados a esta herramienta, el 55% de lo comprometido en la Adenda del Plan de Recuperación. Y no parece que se vaya a producir un avance muy significativo, ya que no existe interés real por parte de las empresas, según ha podido confirmar THE OBJECTIVE con fuentes del sector. Esto supone que una buena parte de estos recursos tendrán que devolverse a la Unión Europea.

A comienzos de 2021, el Gobierno anunció que los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) serían unos de los ejes del reparto de los fondos europeos Next Generation. Un instrumento encargado de poner en marcha grandes transformaciones industriales con colaboración público-privada para impactar directamente en todo el arco productivo, desde pequeñas pymes hasta grandes corporaciones. En los sucesivos meses fueron presentándose hasta 12 Perte, con el vehículo eléctrico, las energías renovables, la salud, la industria naval y los semiconductores entre los más destacados.

Para ello se destinaron más de 42.000 millones de euros, casi una cuarta parte de todos los fondos europeos adjudicados a España. De ellos, 25.000 fueron ayudas directas y los otros 17.000, créditos. Los Pertes se constituyeron así en la gran promesa de modernización del tejido productivo, con un gran impacto en el crecimiento económico y en el empleo gracias a una combinación de innovación, riesgo tecnológico y desarrollo de la cadena de valor. 

Convocatorias adjudicadas

Cuando ya se han cumplido casi cuatro años de la puesta en marcha del Plan de Recuperación —y a solo once meses para que se acaben los plazos de ejecución— los números avanzan más lento de lo esperado. Hasta la fecha se han resuelto ayudas por 18.588 millones de euros, mientras que se han concedido créditos por valor de 703 millones. En el caso de las convocatorias resueltas también se incluyen los fondos transferidos a las comunidades autónomas, por lo que tampoco es seguro que hayan llegado a su destinatario final. La herramienta Elisa dice también que hay 4.352 millones de convocatorias en «próxima resolución».

El problema es que estas cifras prácticamente no se han movido desde julio, cuando este diario publicó que solo se habían repartido 19.136 millones. Han pasado más de tres meses desde entonces y las cifras no han mejorado, pese a que los datos de ejecución total de fondos europeos sí se han movido, al menos en un par de ocasiones. Desde antes del verano, el reparto de los Next Generation comprometidos ha crecido al menos en 3.000 millones.

Las fuentes consultadas coinciden en señalar que el gran hándicap de los Perte son los recursos destinados a créditos. En estos momentos quedan por adjudicar 4.300 millones en ayudas y se considera que los 3.000 que todavía no están en convocatorias se terminarán entregando —aunque sea de manera acelerada— antes de agosto del próximo año. Pero el farolillo rojo está en los otros 17.000 millones de préstamos, porque ninguna gran empresa, ni menos una pequeña, está dispuesta a embarcarse en procesos de endeudamiento, aunque sea con bajos intereses.

Problemas con los créditos

Muchas de ellas quedaron muy tocadas durante la pandemia y hasta hace poco todavía estaban devolviendo préstamos avalados por el Instituto de Crédito Oficial (ICO), lo que les ha obligado a realizar importantes ajustes. Si a esto se le suma la extrema burocracia en la gestión y entrega de los fondos Next Generation, se produce un cuello de botella para que nadie se interese realmente en estos créditos. Por otro lado, el Ejecutivo tampoco está articulando los diversos instrumentos a través de los cuales —en principio— deberían fluir estos recursos.

Las empresas consultadas —muchas de ellas se han planteado pedir fondos europeos— consideran que buena parte de estos 17.000 millones terminarán teniendo que ser devueltos a Bruselas por falta de interés y porque los plazos no se podrán cumplir. Incluso fuentes parlamentarias consultadas por este diario indican que el Gobierno ya reconoce en privado que se intentará forzar la máquina lo máximo posible, pero que se asume que muchos de estos recursos terminarán perdiéndose.

El Perte más perjudicado será el de los semiconductores. La idea del Gobierno era poder poner en marcha en España una gran fábrica de chips al nivel de las que funcionan en Asia, pero hasta la fecha no ha logrado convencer a un gran partner internacional para que se instale dentro de nuestras fronteras. Se dotó al proyecto con 12.250 millones, la mayoría préstamos, pero hasta la fecha solo se han repartido 880 millones de convocatorias resueltas, todas ellas vinculadas a la investigación y el desarrollo, pero no a la fabricación.

Diferentes Perte

El Perte más avanzado es el del Hidrógeno Verde, con 5.770 millones de euros adjudicados y otros 3.223 en convocatorias activas. Faltan por moverse otros 1.800 millones que —según las fuentes consultadas— probablemente se queden sin repartir, ya que con todo lo que se ha distribuido, ya se ha favorecido prácticamente al sector completo.

Otro de los proyectos que parece haber llegado al fin de su ciclo de ejecución es el del Vehículo Eléctrico y Conectado (el Perte VEC), icono de los Perte, ya que fue el primero que se lanzó y el que más exposición pública ha tenido. Después de varias convocatorias fallidas, ha logrado adjudicar 2.718 millones en ayudas y otros 342 en créditos. Con otros 416 en próxima resolución. Se le dotó con un total de 4.120 millones para cumplir con el objetivo de construir coches eléctricos en España abordando toda la cadena de producción, desde baterías eléctricas y componentes hasta ensamblajes.

El Perte de la Economía Social de los Cuidados ha adjudicado 2.477 millones; el Aeroespacial 2.128 millones en ayudas y otros 103 en créditos; el de Salud de Vanguardia 1.800 en ayudas y 236 en préstamos; el del Ciclo del Agua 981 millones; el Agroalimentario 897 millones; el de la Descarbonización Industrial 594 millones; el de la Economía circular 211 millones; y el de la Industria Naval ha repartido 96 millones.

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