Maurici Lucena gana el pulso a Puente con su plan para fortalecer solo a grandes aeropuertos
El objetivo del presidente de Aena es redirigir el tráfico de aviones a los lugares en los que haya más gasto por pasajero
El presidente de AENA, Maurici Lucena. | Europa Press
El presidente de Aena (la empresa pública encargada de la gestión de los aeropuertos), Maurici Lucena, gana la batalla al ministro de Transportes, Óscar Puente, con su plan para favorecer los grandes aeropuertos frente a los regionales. Fuentes internas de la compañía pública valoran a THE OBJECTIVE que existe en la cúpula un clima de victoria frente al intento del Ministerio de Transportes de redirigir el tráfico aéreo y potenciar los pequeños aeropuertos, en los que existe menos facturación para la empresa pública.
Con este movimiento, Lucena, que proviene del PSC (Partido Socialista de Cataluña), saca músculo frente a Puente, después de que a este último no le haya temblado el pulso para destituir en apenas un cuatrimestre a los dos presidentes de las principales empresas públicas ferroviarias, ADIF y Renfe. Una decisión que ha tomado a pesar de que una directiva europea exige que no exista interferencia del Ministerio de Transportes entre el administrador de la infraestructura y la operadora ferroviaria.
Aena ha mantenido durante el último año un tira y afloja con las aerolíneas. Estas le instaban a bajar sus tasas en aquellos aeropuertos en los que había menos demanda para incentivar los vuelos. Pero la empresa pública se ha negado. Sin embargo, el plan de Lucena ha provocado los primeros efectos perversos para algunas provincias. Así, el pasado jueves, la aerolínea Ryanair anunció que España iba a «perder 800.000 plazas para el verano de 2025 por las excesivas tasas aeroportuarias regionales de Aena» y que se cancelaban «todos sus vuelos a Jerez (Cádiz) y Valladolid, además de reducir el tráfico en Vigo, Santiago (Galicia), Zaragoza (Aragón), Asturias y Santander (Cantabria)».
El comunicado de Ryanair tuvo una contundente respuesta por parte de Aena. «Lamentamos que Ryanair utilice argumentos espurios que no se corresponden con la realidad de las tarifas aeroportuarias de España para confundir a los ciudadanos y presionar descaradamente a las instituciones públicas nacionales y regionales». Para añadir, en el párrafo final, que reducir las tarifas «podría considerarse ayudas de Estado».
El presidente de Aena tiene claro que la hoja de ruta de la empresa en España pasa por los aeropuertos de Madrid, Barcelona, Valencia y Málaga, entre otros. El objetivo es que estos se reconviertan en hubs comerciales y no en meros aeropuertos de tránsito para pasajeros. La idea de la compañía es convertirlos en experiencias para el cliente, ampliando para ello las zonas VIP. Aena, además de las tasas que cobra a las aerolíneas, recibe unos importantes ingresos por cada negocio (ya sea una cafetería o una tienda de ropa) que hay dentro del aeropuerto.
Aena, participada por el Estado con un 51%, obtiene una media en España por las compras que hacen los viajeros en las tiendas de los aeropuertos de 5,5 euros por pasajero, lo que genera una importante tesorería. Según informó Expansión, Aena recibe el 54% de las ventas de chocolates y confiterías de un duty free (lugares exentos de impuestos), el 52% de la venta de juguetes, el 28% de accesorios tecnológicos, el 48% del tabaco y el 49% de las bebidas alcohólicas, entre otros. Por otro lado, cuenta con las tasas que carga a las aerolíneas, y que supone una media de 9,5 euros por viajero. El resultado de multiplicar las tasas por los millones de pasajeros y la mercancía vendida en los aeropuertos da como resultado la facturación de Aena.
Las aerolíneas han presentado varias propuestas para que se reduzcan las tasas aeroportuarias, pero todas ellas han sido desestimadas. En cambio, Aena ha lanzado tímidos planes de incentivos, que no han seducido a las aerolíneas. Uno de estos, por ejemplo, fue ampliar los incentivos para los aeropuertos regionales que aún no habían recuperado el tráfico anterior a la pandemia. Estos consistían en un 100% de descuento en las prestaciones de seguridad aeroportuaria y de PMR (Pasajero con Movilidad Reducida) a los pasajeros adicionales con respecto a la temporada equivalente del año 2023.
El plan de Lucena está funcionando, como así demostró la compañía hace unos días, cuando pulverizó récords en la red aeroportuaria española, recuperando además el tránsito tras la covid en Madrid y Barcelona. De esta forma, España no pierde capacidad, sino que se redirige el tráfico hacia las grandes urbes y olvida a las pequeñas.
