El Ayuntamiento de Madrid aprueba por unanimidad la Operación Chamartín
Con el nombre de Madrid Nuevo Norte se desbloquea una operación paralizada durante 26 años
El Ayuntamiento de Madrid ha aprobado este lunes por unanimidad Madrid Nuevo Norte, la conocida como Operación Chamartín que llevaba 26 años bloqueada. Todos los partidos (PP, Ciudadanos, Vox, Más Madrid y PSOE) han votado a favor de esta aprobación provisional que pretende transformar la zona norte de la capital.
Mariano Fuentes, nuevo delegado de Urbanismo por Ciudadanos, ha definido la operación como la de «mayor envergadura en materia de transformación urbana de toda Europa». Va a actuar sobre 2,65 millones de metros cuadrados a lo largo de 5,6 kilómetros en dirección norte hasta el enlace con la M-40. El principal objetivo de este proyecto es «cerrar la profunda brecha urbana del norte de la ciudad», ha dicho Fuentes.
Se van a construir 10.474 viviendas —24,5% de ellas tendrán algún tipo de protección—, 400.000 metros cuadrados de suelos verdes y 295.000 metros destinados a equipamientos públicos.
La previsión es que las primeras obras, las de urbanización, comiencen en 2021, aunque transcurrirá una década hasta que se empiecen a construir los primeros edificios. Madrid Nuevo Norte se desarrollará en un periodo de 25 años, supondrá 7.100 millones de euros en inversión (unos 7.900 millones de dólares) y la creación de 200.000 puestos de trabajo, directos e indirectos.
La estación de Chamartín será el eje de la operación, dividida en cuatro bloques. Se va a edificar un nuevo complejo ferroviario —que estará a cargo de Adif— que incluye el soterramiento de las vías, lo que liberará una superficie aproximada de 30 campos de fútbol; y se va a desarrollar un centro de negocios. Los otros dos bloques son la construcción en Las Tablas Oeste, al este de las vías, y en el área Malmea-San Roque-Tres Olivos, al oeste de las vías.
Fuentes ha hecho hincapié en la importancia del transporte público en esta transformación de la ciudad. Por lo que se van a desarrollar tres paradas más de la línea 10 de metro, nuevas estaciones de EMT, dos estaciones de cercanías en el distrito de Fuencarral y un intercambiador de transporte en Chamartín.
Un proyecto de Carmena
El proyecto fue desarrollado por el equipo de Manuela Carmena, que lo convirtió en una de sus grandes apuestas. El nuevo concejal de Ciudadanos ha reconocido que tras la formación del nuevo Ejecutivo y el estudio del plan estuvieron tentados de modificarlo «para imprimirle un carácter más liberal».
«El cuerpo nos pedía mejorarlo, no se lo voy a negar. Pero paramos porque eso implicaba condenar a la ciudad de Madrid a la parálisis y al ostracismo durante meses, quizás un año más, y dada su escala nunca podríamos redactar un proyecto de máximo consenso, del gusto de todos», ha dicho el nuevo concejal.
En esa misma línea se ha expresado la vicealcaldesa Begoña Villacís que ha reconocido que no es 100% el planteamiento que ella hubiera hecho de la Operación Chamartín, como tampoco cree que lo están el resto de grupos. «Si fuese el 100% del planteamiento de todos, no saldría como ha salido: por unanimidad. Así tienen que salir los grandes proyectos de ciudad: por unanimidad», ha dicho Villacís, que ha hablado de un «pleno histórico«.
El proyecto es fruto del acuerdo de todas las administraciones (Ministerio de Fomento y Comunidad de Madrid, que también ha dado el visto bueno preliminar) y fue impulsada inicialmente a través de una sociedad creada por BBVA y la Inmobiliaria San José, hoy conocida como DCN (Distrito Castellana Norte).
«No se olviden del sur»
La concejal socialista Mercedes González ha reconocido la importancia de este proyecto, pero ha pedido que el Ayuntamiento no se olvide de los distritos del sur de la ciudad. «Que no se olviden del sur, que vivimos en un ciudad desequilibrada y tremendamente injusta. Hoy el Norte de la ciudad tiene una oportunidad, otra más, pero el Sur nos necesita y nos espera», ha dicho.
