El Diario de Mallorca prepara una querella por la incautación del móvil de uno de sus redactores
Los servicios jurídicos del Diario de Mallorca preparan una querella criminal por la incautación ayer del teléfono móvil de uno de sus redactores en el marco de la investigación del caso Cursach, una actuación que el periódico califica en su editorial de hoy de «coacción intolerable».
Los servicios jurídicos del Diario de Mallorca preparan una querella criminal por la incautación ayer del teléfono móvil de uno de sus redactores en el marco de la investigación del caso Cursach, una actuación que el periódico califica en su editorial de hoy de «coacción intolerable».
La dirección del diario ha confirmado que los juristas de Prensa Ibérica, el grupo editor del periódico, están estudiando todos los aspectos de la intervención ordenada por el juez Miguel Florit, que además de la requisa del teléfono del periodista Kiko Mestre instaba a la entrega de sus ordenadores o cualquier otro soporte electrónico. El periodista afectado ha criticado esta actuación en sus redes sociales.
Quiero agradecer todas las muestras de apoyo. Hoy he sido yo, pero mañana será otro periodista. Ante estos atropellos, ¿cómo se van a fiar ahora las fuentes de los periodistas si requisan sus herramientas de trabajo? Que nadie me llame porque no puedo contestar
— Kiko Mestre (@Piomoa43) 11 de diciembre de 2018
El periódico, que se negó a entregar esos equipos, considera que la actuación judicial apoyada por la Fiscalía Anticorrupción vulnera el derecho al secreto profesional amparado por el artículo 20 de la Constitución, y por ello ejercerá acciones legales contra los responsables. La subdirectora Marisa Goñi ha resaltado que desde la tarde de ayer han recibido cientos de llamadas en su centralita, desde la isla, el resto de Baleares y la península, de personas que han expresado su apoyo a Diario de Mallorca y su rechazo a la intervención policial.
Los trabajadores de Diario de Mallorca, móvil en mano, nos solidarizamos con nuestro compañero Kiko Mestre, y mostramos nuestro rechazo por el auto judicial emitido para el registro de la redacción del periódico, en el marco de la investigación del Caso Cursach.#LibertaddePrensa pic.twitter.com/g7YLBG9bZZ
— Diario de Mallorca (@diariomallorca) 12 de diciembre de 2018
En su editorial de hoy, el rotativo señala que la orden judicial no tiene precedentes y recuerda que se llevó a cabo «a instancias de dos imputados en una macrocausa de corrupción que afecta a empresarios poderosos, policías, funcionarios y políticos». El diario considera «gravísimas» las consecuencias inmediatas de la actuación contra su redactor, que son «la identificación de las fuentes de información y la coacción a su trabajo periodístico«, cuyo objetivo final es «impedir que se publique información sobre el caso».
La dirección en Baleares del otro medio afectado por la operación instada por el juez del caso Cursach, Europa Press, ha indicado que los servicios jurídicos de la agencia estudian su respuesta.