Relatando la vida
Levantémonos a hacer algo que merezca la pena ser recordado: nuestra página puede estar todavía por escribir
Levantémonos a hacer algo que merezca la pena ser recordado: nuestra página puede estar todavía por escribir
Personas que se dejan fotografiar, mirando a la cámara, aparentemente con solo este hecho en común. Posan, miran, y escriben su situación. Son relatos que independientemente serían recordados como momentos puntuales de una vida, como páginas perdidas de un diario… Pero que conjuntamente relatan algo mucho peor: una situación que, incluso acabándose mañana, nadie olvidará.
Algunos no la olivarán porque ganaron mucho dinero, aunque serán pocos. Otros no la olvidarán porque habrán perdido cosas que les había costado años y años en conseguir: una casa, en el mejor de los casos. La familia o la vida, en el peor.
Y, sin embargo, decir que aquí acaba todo sería simplificar demasiado para un medio que enseña tanto en tan poco como The Objective: si leemos todos los relatos, veremos que otros recordarán este año por haber conseguido cosas, pequeñas o grandes, a pesar del entorno y la situación.
Y es ese «a pesar» el que nos debería empujar cada mañana a salir de la cama, a saltar para intentar que cuando escribamos nuestra ficha el 31 de diciembre de este año, podamos poner algo que no sea simplemente lo bien o lo mal que nos ha ido. Alguien es joven cuando tiene más por hacer que lo que ya ha hecho, y eso se puede aplicar hasta a un anciano de 99 años: puede que sumando todo lo que ha hecho en su vida, lo que haga este mes pueda llenar más páginas de su biografía que todo lo anterior.
Al fin y al cabo, es imposible meterse en la piel de alguien que solo o sola pueda controlar toda la economía: simplemente, no existe. Pensábamos que eran los presidentes, pero hemos visto que no.
No debemos esperar a que nuestro relato sea igual a otros 300 relatos. Miremos esta serie que sale hoy y veamos que no hay dos historias iguales. Y después, levantémonos a hacer algo que merezca la pena ser recordado: nuestra página puede estar todavía por escribir.