THE OBJECTIVE
Pilar Garcia de la Granja

Letizia necesita una sonrisa

La futura Reina consorte de España lo tiene todo para ser feliz y transmitirlo. Es joven, guapa, madre de dos niñas preciosas y su marido es Rey. Si viviéramos en la realidad virtual de la Monarquía la Princesa Letizia solo tendría razones para sonreír.

Opinión
Comentarios
Letizia necesita una sonrisa

La futura Reina consorte de España lo tiene todo para ser feliz y transmitirlo. Es joven, guapa, madre de dos niñas preciosas y su marido es Rey. Si viviéramos en la realidad virtual de la Monarquía la Princesa Letizia solo tendría razones para sonreír.

La futura Reina consorte de España lo tiene todo para ser feliz y transmitirlo. Es joven, guapa, madre de dos niñas preciosas y su marido es Rey. Si viviéramos en la realidad virtual de la Monarquía – la que se vive, por ejemplo en Holanda-, la Princesa Letizia, futura Reina de España, solo tendría razones para sonreír.

Y justo es lo que le falta. ¿Porqué no sonríe Letizia?. Una mujer de clase media, que se enamora de un príncipe heredero, que se casa con él, cuya vida cambia radicalmente de los estudios de televisión a los Palacios y las vacaciones de cinco estrellas, y todo por amor.

Nadie obligó a Letizia Ortiz a casarse con un príncipe, y a su edad ya sabía lo que era un matrimonio fallido y una monarquía. En estos diez años de matrimonio ha conseguido parecerse en casi todo a la Reina de Jordania, menos en la sonrisa. ¿Tanto cuesta una sonrisa para el pueblo?.

Un pueblo que se debate entre la continuidad de la Monarquía y las posiciones republicanas. Un pueblo que, sobre todo, necesita de caras amables ante la crisis económica y las desigualdades sociales. Y sin embargo la Princesa no sonríe. Y sus ideales infantas no aparecen en la prensa como los hijos del resto de herederos a la Corona de las Casas Europeas.

Este domingo la Princesa acudía al acto de despedida de su Majestad el Rey con los ejércitos, y allí donde la Reina Sofía era todo amabilidad, el Rey era emoción y Felipe tranquilidad contenida, Letizia parecía incomoda. Ni una sonrisa en el acto, ni una sonrisa en el besa manos. Ni un gesto de cordialidad. Es urgente que en la Casa Real alguien le explique a Letizia, Reina en dos semanas, que su obligación es acudir a los besamanos, sonreír al pueblo y ganarse su cariño. No tiene ni más ni menos responsabilidad que esa. Y que es mucha, teniendo en cuenta los desafíos que tiene por delante su marido. Letizia necesita sonreír para convencer.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D