El hombre del 11-S anuncia atentado nuclear
¿Cómo puede el señor Dick Cheney conocer que un hecho tan improbable va a suceder? Sin duda alguna, porque este señor, directo responsable del autoataque del 11-S, cuenta con información privilegiada, al igual que otros traidores al pueblo norteamericano como el senador Lindsay Graham.
¿Cómo puede el señor Dick Cheney conocer que un hecho tan improbable va a suceder? Sin duda alguna, porque este señor, directo responsable del autoataque del 11-S, cuenta con información privilegiada, al igual que otros traidores al pueblo norteamericano como el senador Lindsay Graham.
Que los cinco servicios de seguridad aérea (CIA, Pentágono, NASA, aviación civil y militar) que protegen al país con el mayor ejército del Planeta decidieran no actuar cuando dos aviones se desviaron de su ruta, es una casualidad que deja de serlo cuando recordamos que aquel fatídico día de septiembre del 2001, se celebraban otros tantos ejercicios militares de simulación… ¡de un ataque con aviones sobre suelo norteamericano!
Casualmente, unos días antes de la jornada que cambió el Planeta Tierra, las correspondientes cadenas de mando que debían actuar de cortafuegos, en el caso de que alguno de esos cinco servicios fallaran, se hubieran concentrado en una sola mano, es algo que hoy debe ser traído a nuestra memoria.
Y debemos recordarlo porque la persona que concentró ese poder, el entonces vicepresidente de los Estados Unidos de América, de nombre Dick Cheney, esta misma semana ha anunciado que un nuevo 11-S, pero de características nucleares, se apresta a suceder en suelo norteamericano.
¿Cómo puede el señor Dick Cheney conocer que un hecho tan improbable va a suceder? Sin duda alguna, porque este señor, directo responsable del autoataque del 11-S, cuenta con información privilegiada, al igual que otros traidores al pueblo norteamericano como el senador Lindsay Graham, que hace varios meses realizó un anuncio similar.
Quienes venimos siguiendo la información alternativa, sabemos que los militares norteamericanos conocen que el verdadero enemigo de los Estados Unidos no son unos locos musulmanes de largas barbas, sino los mismos conspiradores que denunció el asesinado presidente Kennedy en su ya mítico discurso sobre las sociedades secretas.
¿Por qué este Poder oculto amenaza con generar una catástrofe nuclear contra su propio país? La razón es que los militares patriotas, conocidos popularmente como “caballeros blancos”, están a punto de devolver al pueblo norteamericano el poder con el que los conspiradores generan las crisis y la esclavitud de la Humanidad: la emisión del dinero.
El proyecto para volver al patrón-oro, de la mano del grupo de naciones integrados en el BRICS y los países no alineados, conocidos hoy día como G-77, está a punto de ver la luz y los conspiradores quieren impedirlo de la única manera que conocen: causando el caos.
Lo que está sucediendo ahora mismo en Irak, Ucrania y el sudeste asiático está directamente relacionado con este hecho. De ahí la amenaza del «señor» Dick Cheney.